Una marcha de la comunidad universitaria recorrió este martes algunas calles del centro histórico de la ciudad de Guatemala cuando se conmemoran los 347 años de fundación de la Universidad de San Carlos. Durante la misma se exigió la renuncia de quienes integran el CSU por avalar un fraude en la elección a rector y por la expulsión del estudiante Camilo García.
Por Juan Calles
Frente al edificio del Centro Cultural Universitario (Antiguo Paraninfo Universitario), escenario de importantes momentos de la historia de la Universidad de San Carlos de Guatemala (USAC), se reunieron grupos de distintas generaciones de universitarios, para conmemorar los 347 años de fundación de la USAC.
Los más jóvenes resisten contra el fraude en la elección a la Rectoría, y los otros se unieron para acuerpar la movilización.
Sin embargo, no los convocaba el hecho de la fundación de una de las primeras universidades en el continente americano, las pancartas y las consignas, gritadas a voz en cuello, se referían a las actuales autoridades universitarias como corruptas y fraudulentas.
Una buena parte de la comunidad universitaria no reconoce al actual Consejo Superior Universitario, (CSU), pues en mayo del año pasado, cuando se eligió al rector Walter Mazariegos, el proceso tuvo varias irregularidades que se han considerado como un fraude. Como respuesta, el movimiento estudiantil a nivel nacional tomó el campus central y algunos centros regionales exigiendo que se repita el proceso de elección.
“No estamos aquí para conmemorar la fundación, estamos aquí para defender la autonomía que ha sido pisoteada y continúa siendo pisoteada todos los días por un CSU que ha traicionado a la USAC”, repetían los discursos de quienes tomaban el micrófono para alentar a los presentes a protestar y defender la autonomía universitaria.
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La expulsión de Camilo García
El tema que marcó la movilización fue la expulsión del representante estudiantil de la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacia, Camilo García, quien tras llamar usurpador a Walter Mazariegos, fue expulsado de su representación ante el CSU y como estudiante de la Universidad con el voto de los 22 representantes del gobierno universitario.
“Todos somos Camilo”, “Camilo no está solo”, gritaban a coro mientras por los parlantes se escuchaba a una estudiante decir que la marcha se dirigía hacia la Oficina de los Derechos Humanos (PDH), en donde entregarían una carta con más de dos mil firmas en las que se pedía al procurador Alejandro Córdova, que se investigara la violación del derecho a la educación de García.
Ya frente a las instalaciones de la PDH se presentó Camilo García quien fue vitoreado por los manifestantes que aseguraron que la expulsión aviva la resistencia estudiantil contra el fraude cometido por el CSU en marzo pasado.
Ante la ausencia Córdova, representantes de la PDH recibieron la carta y las firmas, sin embargo, García decidió entrar en compañía de sus compañeros de facultad para entregar él mismo una denuncia contra el CSU, por violar su derecho a la educación. Como respuesta la PDH le informó que de oficio iniciaron una investigación el día que el CSU votó por su expulsión.
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El CSU decide expulsar de la USAC a Camilo García autoridad universitaria
La marcha continuó hacia el Pasaje Rubio, en donde se encuentra la placa conmemorativa a Oliverio Castañeda de León, el Secretario General de la Asociación de Estudiantes Universitarios (AUE), asesinado por fuerzas del Estado en 1978, después de dar un discurso en la concha acústica del parque central a unas pocas cuadras.
En el lugar se leyeron las exigencias de la Coordinadora General de Estudiantes (CGE) que pidió la renuncia de los 22 integrantes del CSU por violar la autonomía universitaria y apoyar la imposición de Mazariegos como rector universitario, además de exigir la reinstalación de Camilo García como representante estudiantil y revertir su expulsión.
Leyeron lo que llamaron “Ejecución Simbólica” nombrando a cada uno de los miembros del CSU y colocaron piñatas con sus fotografías, la de Mazariegos tenía una cabeza de cerdo. Al final entre cantos y risas quemaron algunas de las piñatas.
García recordó a Oliverio Castañeda, que minutos después de pronunciar su discurso fue asesinado en el lugar. “Hoy no nos matan con balas, pero nos expulsan y nos criminalizan”, dijo García mientras sus compañeros coreaban “Camilo, amigo, el pueblo está contigo”.
La USAC se fundó en 1676 por la cédula real del rey Carlos II de España, que luego de fundar universidades en México, Perú y República Dominicana, solicitaron la fundación de una universidad en la región de Centroamérica.
Las primeras siete cátedras impartidas fueron la de Teología escolástica, la Teología moral, Cánones, Derecho, Medicina y Lenguas. El primer día de clases registrado es el 7 de enero de 1681 con sesenta estudiantes inscritos entre ellos 7 de teología, 36 de filosofía y el resto de lenguas, entre ellas el Cakchiquel.
