Por Karen Moreno / Revista Gato Encerrado
Cientos de personas de diferentes organizaciones defensoras de derechos humanos, colectivos feministas, ambientalistas y movimientos sociales marcharon este domingo 15 de enero por las calles de San Salvador para conmemorar los 31 años de la firma de los Acuerdos de Paz de 1992, que puso fin al conflicto armado de 12 años en El Salvador.
Esta fecha ha sido minimizada por el actual gobierno. En 2020, el presidente Nayib Bukele calificó de “farsa” la guerra y los Acuerdos de Paz porque fueron una “negociación entre dos cúpulas” que no benefició a los ciudadanos.
“Marcho porque hoy se conmemora un hecho importante en la historia salvadoreña, que ningún gobierno va a poder borrar porque forma parte de nuestra historia. Porque la historia y la memoria son fundamentales para construir el futuro ”, reflexionó Morena Herrera, quien marchó junto a su colectivo feminista.
Los ciudadanos que participaron en la marcha exigieron al Estado y al gobierno que respete los derechos humanos.
Entre las principales demandadas, pidieron libertad y justicia para las personas capturadas arbitrariamente en el régimen de excepción, así como para los líderes comunitarios y exguerrilleros de Santa Marta, en Cabañas, y para los sindicalistas de la alcaldía de Soyapango detenidos por exigir el pago de sus salarios.
Glenda Rodríguez viajó desde el Bajo Lempa, en el departamento de Usulután, con un objetivo claro: marchar para denunciar la captura de su hermano Walber Rodríguez López. Contó que el joven fue capturado el 1 de mayo de 2022, bajo el régimen de excepción, cuando se conducía en su motocicleta junto a su esposa y su hija. Como en la mayoría de casos, no le dieron explicaciones. Su hermano ya cumplió 27 años “dentro de ese infierno, en Mariona”, describió Glenda. Para la familia de Walber, la situación ha sido “difícil”.
“Siempre hemos sido una familia unida, pero tuvimos que pasar una Navidad y un Año Nuevo sin él. Mi mamá cumplió años sin él en la casa, mi sobrina de tres años pregunta cuándo regresará papi, por qué se lo llevaron”, dijo a esta revista. Añadió que es duro sobrellevar esta situación porque salen personas muertas de Mariona y de otros centros penitenciarios y temen que pueda ocurrir lo mismo con su hermano.
Los asistentes también se manifestaron contra el anuncio del presidente Bukele de buscar la reelección en 2024, la implementación de la Ley Bitcoin, la aprobación de la nueva de pensiones y la situación de violencia contra las mujeres.
La Policía Nacional Civil (PNC) colocó retenes en diferentes puntos de entrada de San Salvador. “Se subieron a preguntarnos si veníamos a la marcha y quién nos traía”, dijo uno de los asistentes a la marcha.
Las marchas, que tuvieron menor asistencia que en 2021, salieron desde el parque Cuscatlán y el parque Infantil y concluyeron con una concentración en la plaza Cívica, en el Centro Histórico de San Salvador.
