Créditos: Prensa Comunitaria
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Dos días después de que la alianza oficialista rechazara las objeciones constitucionales contra el presupuesto, el presidente Alejandro Giammattei sancionó el decreto y el mismo fue publicado en el Diario de Centro América.

Rony Ríos

El presidente Alejandro Giammattei ignoró los pronunciamientos de diversas cámaras empresariales, tanques de pensamiento, diputados de oposición y del presidente electo y decidió sancionar el Presupuesto de Ingresos y Egresos del Estado para el ejercicio fiscal de 2024.

Giammattei en dos días analizó el presupuesto de Q124 millardos 879 millones 970 mil, lo sancionó (aprobó) y lo mandó a publicar en el Diario de Centro América.

El presupuesto fue aprobado en la última sesión ordinaria del Congreso, pero varios diputados opositores plantearon objeciones alegando que el decreto contenía una serie de inconstitucionalidades; sin embargo, la bancada oficial y el presidente Giammattei decidieron ignorar los señalamientos y aprobarlo.

Las objeciones

El presidente electo, quien previo a que el decreto fuera enviado al Organismo Ejecutivo, envió una misiva a Giammattei para pedirle que lo rechazara, señaló este día que “el presupuesto que deja este gobierno no refleja los valores y necesidades de nuestro país”.

Asimismo, recalcó que como gobierno entrante tomarán las medidas legales para tener un presupuesto que permita que cada centavo sea utilizado adecuadamente y para el bienestar de los guatemaltecos.

Las cámaras empresariales y los tanques de pensamiento señalaron que el presupuesto pone en peligro el cumplimiento del pago de deuda pública ya preestablecida por las restricciones a en el manejo de bonos del tesoro.

El Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras (CACIF) indicó que este presupuesto “el Estado podría quedar imposibilitado de hacer frente a sus obligaciones financieras y caer en incumplimiento de pagos, lo cual dañaría gravemente la buena reputación y calificación del país en los mercados financieros internacionales”.

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En tanto, la Fundación para el Desarrollo de Guatemala (Fundesa) argumentó que con el presupuesto “se dejó en riesgo al Estado de Guatemala de caer en una parálisis en la colocación o recolocación de deuda, ya que el Gobierno debe contar con la aprobación previa del Congreso para emitir, negociar o colocar Bonos del Tesoro”.

Fundesa también argumentó que estas acciones afectan negativamente al país porque no se podrían recolocar los bonos que vencen el próximo año y que ascienden a Q6,260.9 millones. Además, la Fundación adverso las asignaciones específicas a ONG y para proyectos del CIV.

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Ese mismo punto fue abordado por el director del Icefi, Ricardo Barrientos, quien enfatizó que se podría paralizar la recolocación de bonos y el país podría incumplir sus compromisos de deuda, lo que técnicamente se conoce como default.

Las autoridades ancestrales plantearon, desde hace dos semanas, un amparo en contra del presupuesto por considerar que contenía ilegalidades.

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