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Ejército y policía incursionan en comunidades de Petén y destruyen sus caminos

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Créditos: PNC Guatemala, Twitter.
Tiempo de lectura: 4 minutos

 

Para el Estado estas comunidades no existen, no tienen derechos y los ha tenido en total abandono. El gobierno no ha invertido un centavo en esta región. Afectados. 

Por Francisco Simón Francisco

Un aproximado de 150 radiopatrullas de la Policía Nacional Civil (PNC) y 12 camiones del ejército, incursionaron en la Sierra del Lacandón, la madrugada de este miércoles 17 de agosto, y destruyeron con explosivos los caminos que conectan a las comunidades de Nueva Jerusalén II y al caserío de la Revancha, situadas en el municipio de La Libertad al norte de Petén.

Fotografías comunitarias / Prensa Comunitaria.

Las comunidades no sabían nada de lo que iba a ocurrir. A eso de las 2 de la mañana, la gente empezó a escuchar los movimientos de los vehículos y eso alertó a las familias. “Era muy de noche y la gente tuvo miedo de acercarse al lugar, ellos decían: ‘mejor no nos vamos porque el ejército puede disparar contra nosotros y dejar allí muerto a uno, como ha ocurrido en otras ocasiones’”, relató don Silvestre Calletano, un comunitario de Nueva Jerusalén, de 43 años.

Al amanecer, los pobladores llegaron al lugar y encontraron los caminos ya destruidos con varias detonaciones. De acuerdo a los datos comunitarios, en el camino a Nueva Jerusalén, las fuerzas combinadas detonaron cuatro explosivos que dejaron grandes hoyos, mientras que en la Revancha se registraron ocho agujeros enormes con 10 metros de diámetros.

En una publicación escueta, la PNC aseguró que en coordinación con el Consejo Nacional de Áreas Protegidas (CONAP) y Ejército de Guatemala dieron cumplimiento a una orden judicial para destruir dos supuestas carreteras clandestinas, ubicadas en el interior del parque Nacional Sierra del Lacandón.

Los pobladores, en un comunicado, aseguran que las instituciones armadas del Estado llegaron a la Sierra como un “ladrón” y entraron en la oscuridad para destruir los caminos que la propia gente ha construido desde hace tres décadas.

“Los caminos fueron construidos por los propios pobladores para facilitar la movilización en tiempos de emergencia o para sacar nuestras cosechas al municipio y no son clandestinos como dicen las autoridades”, dijo don Calletano, en una entrevista a Prensa Comunitaria.

Nosotros hasta hemos dejado de comer una tortilla o un pan, hemos vendido gallinas o coches (cerdos) para ganar dinero y aportar a la construcción del camino, ahora tenemos que empezar de nuevo, lamentó.

Fotografías comunitarias / Prensa Comunitaria.

Otro comunitario del lugar, quien pidió omitir su nombre, dijo, que las dos comunidades de la Sierra del Lacandón han tenido un proceso de formación desde que se asentaron hace más de 30 años en esa región. “Para empezar no son caminos clandestinos, desde 1990 al 2000 se construyeron de manera colectiva. De hecho, el CONAP ha transitado por esos caminos y ahora que casual, que lo vienen a destruir y los llaman clandestinos”, cuestionó.

El comunitario recordó a las autoridades del gobierno que los caminos siempre han existido. “Son caminos chateros que se formaron muchos años atrás, los cuales eran utilizado también por los madereros”, aseveró.

Agregó, que son medios por los cuales los pobladores han transitado para sacar sus cosechas y para salir de alguna emergencia de salud, por ejemplo, alguna mujer que padece complicaciones con el parto.

Los dos entrevistados indicaron que la misma gente repara constantemente los caminos, “porque estas comunidades para el Estado prácticamente no existen, no tienen derechos y los ha tenido en total abandono, por ese motivo el gobierno no ha hecho ninguna inversión en esa región”, afirmaron.

Fotografías comunitarias / Prensa Comunitaria.

Al ser cuestionados por el tema del narcotráfico, indicaron que es un enfoque institucional que han utilizado las autoridades para invisibilizar a los pobladores. “Para ellos (las autoridades) estas carreteras son caminos de narcotraficantes, es el nombre que han utilizado y que son los que están financiando a las comunidades, para poder ellos transitar libremente, pero en realidad son trabajos propios”, aclararon.

“Primero argumentan de que es área protegida y que allí no debe haber personas y segundo dicen que son caminos clandestinos o ilegales. De hecho, son caminos que las mismas autoridades han utilizado para ir a capturar campesinos, quemar casas o cultivos”, concluyó don Silvestre Calletano.

Fotografías comunitarias / Prensa Comunitaria.

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