Créditos: Congreso de Guatemala
Tiempo de lectura: 4 minutos

 

El diputado Sergio Enríquez Gárzaro y cinco personas más fueron absueltos del proceso judicial conocido como caso Chicamán en el que los acusaban de lavado de dinero y encubrimiento propio. Los jueces del Tribunal en Quetzaltenango indicaron que el MP no presentó suficientes pruebas para confirmar que los ahora absueltos fueron responsables de un caso de corrupción revelado por la extinta CICIG.

Por Shirlie Rodríguez

En el Tribunal de Mayor Riesgo de Quetzaltenango se realizó el juicio en contra del diputado del partido Unidad Nacional de La Esperanza (UNE), Sergio Enríquez Gárzaro y Víctor Hugo Enríquez por el delito de lavado de dinero y de los hermanos Walter, Axel, Osman y Joaquín Gammaro por encubrimiento propio. Todos fueron absueltos por decisión unánime de los jueces.

El caso por el que fueron acusados surge de una investigación que realizó la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) por el desvío de Q14 millones que habían sido asignados para la realización de varios proyectos en Chicamán, Quiché. En esta investigación también fueron sindicados la exdiputada Emmilene Mazariegos y el exalcalde Roberto Candelario Gamarro.

El juicio no duró más de una semana para diligenciar las pruebas que el Ministerio Publico (MP) y la defensa presentaron ante el pleno de jueces.

El juez presidente, Boris Calderón explicó en la audiencia de sentencia que a pesar de que ellos no juzgan la forma de litigio que lleven las partes del proceso llamó la atención el trabajo del MP, porque el caso lo sustentaron con un 99% de documentos y solo presentaron a un testigo.

Agregó que una parte de los documentos que presentó el ente investigador no tenían una fuente que diera el respaldo de los análisis que se hacían. Dio el ejemplo de un informe contable que realizó un experto en la materia pero que no llegó ante los jueces a explicar su contenido y el procedimiento que lo llevó a encontrar anomalías o inconsistencias.

“No es porque nosotros no entendamos los documentos, por eso somos expertos en el derecho, es porque la fuente tiene que oficializar lo que dice el análisis y así tenga el respaldo”, dijo Calderón.

El juzgador mencionó que el MP no llevó a los analistas porque no los ubicaron y únicamente se leyeron los documentos, esto dio paso a que los jueces no le dieran el valor probatorio a los análisis que señalaban que los sindicados cometieron el delito.

Foto: Cortesía de Con Criterio

El caso

La investigación de la FECI con el apoyo de la CICIG señalaba al diputado Enríquez y su familiar Víctor Hugo Enríquez Morales de colaborar con la exdiputada del Partido Patriota, Emmilene Mazariegos de quien recibieron transferencias de dinero del 28 de octubre al 8 de noviembre de 2011, para comprar un vehículo Mercedes Benz GLK200, placas P-389FFD.

La averiguación dice que para ocultar de dónde provenía el dinero para la compra del carro se hicieron más de seis transacciones a la cuenta de la empresa Mis Mantas S.A, de la cual ambos acusados eran socios fundadores. El dinero utilizado supera los Q400 mil.

El pleno de jueces del Tribunal de Mayor Riesgo de Quetzaltenango explicó que en el debate no había indicios que comprobaran que los dos acusados sabían de que el dinero era de origen ilícito.

A los hermanos Gamarro los acusaban del delito de encubrimiento propio porque recibieron mercadería que había sido comprada con el dinero que tenía como destino los proyectos para la municipalidad de Chicamán, además el MP los señalaba tener beneficios por ser hermanos del entonces alcalde de esa localidad.

Los jueces también indicaron que el MP no demostró que hubo un acuerdo previo entre ellos y tampoco se determinó que tuvieran conocimiento previo del hecho.

Por estas razones los seis acusados fueron absueltos de los delitos, además se solicitó que les quitaran cualquier medida de coerción que tuvieran por el caso que los mantenía en juicio.

Sindicados en el caso celebran luego de ser absueltos. Foto: Shirlie Rodríguez.

El diputado Enríquez no llegó a la audiencia y la escuchó de forma virtual, su abogado Guillermo Miranda dijo que obtuvieron un permiso para que estuviera en esta modalidad durante el transcurso del juicio por sus múltiples compromisos por la agenda Legislativa, ya que ahora es diputado.

Enríquez Gárzaro, quien logró en las elecciones de junio 2023 una diputación al postularse con el partido UNE, es cercano a la expresidenciable Sandra Torres, además es hijo  de Sergio Enríquez quien dirige Ministerios Ebenezer, una de las iglesias evangélicas desde donde se generó desinformación en contra de Bernardo Arévalo durante la campaña electoral.

La campaña negra contra Arévalo que se predica desde los púlpitos evangélicos

El caso que el MP no pudo defender en este juicio fue una de las investigaciones que presentó la extinta Comisión Internacional Contra la Impunidad (CICIG). En este también está sindicada la exdiputada Emmilene Mazariegos del PP y el exalcalde de Chicamán, Roberto Candelario Gamarro.

El 29 de enero de 2024 en el inicio del juicio se pidió separar a Mazariegos y a Gamarro de este primer debate, por lo tanto se espera a que ellos sean juzgados en otro proceso judicial el próximo 1 de abril.

COMPARTE