Créditos: Emilio Monterroso
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Andrés Santizo Gómez, del partido oficial Vamos, recibió este jueves 3 de agosto su carné que le acredita el cargo de alcalde municipal de San Mateo Ixtatán, pese a que el pasado 25 de junio, fue señalado de pagar Q1 mil por voto y de agredir a fiscales de otros partidos. Además, sus bases partidarias impidieron que la prensa estuviera al momento del conteo de votos, en uno de los centros de votación.

En San Mateo Ixtatán, que dirigirá Santizo Gómez por segunda vez, hay más en juego, no se trata únicamente del oficialismo o el control político por el clan familiar de los Alonzo, se trata de una región geoestratégica para las hidroeléctricas de la familia Montero Castillo, los dueños de la empresa PepsiCo.

Por Rony Ríos, Nelton Rivera y Francisco Simón

El actual alcalde de San Mateo Ixtatán, Andrés Santizo Gómez, quien se postuló por el partido oficial Vamos, aseguró su segundo periodo consecutivo a pesar de ser denunciado por compra de votos, pago de alimentación y acarreo de personas, que algunos pobladores le señalaron el día de la primera vuelta de elecciones.

Hoy, la Junta Electoral Departamental del Tribunal Supremo Electoral (TSE) entregó en la ciudad de Huehuetenango, los carnet de acreditación a los alcaldes municipales del departamento para el periodo 2024-2028. Entre ellos se encuentra Santizo Gómez, originario de la aldea Tz’ununkap de la zona alta del municipio.

San Mateo Ixtatán es un municipio de Huehuetenango, que en la última década, se vio inmerso en un conflicto por la autorización de hidroeléctricas en su territorio, sin embargo, el 25 de junio la población acudió a las urnas de forma pacífica.

Se localiza en la parte alta de la Sierra de los Cuchumatanes, a unos 325 kilómetros de la ciudad de Guatemala y la frontera sur con México.

En el municipio 25 mil 720 personas estaban aptas para votar, pero solamente 15 mil 855 emitieron su voto, es decir el 61.75 por ciento de la gente participó. El municipio está habitado mayoritariamente por población maya Chuj, pero también Q’anjob’al y mestiza, en la microrregión de Yichk’isis, epicentro de la resistencia contra las hidroeléctricas de la familia Montero Castillo, los dueños de la empresa PepsiCo.

Los candidatos

Siete candidatos participaron en esta contienda electoral en búsqueda de la silla edil, según registros del TSE. Entre los postulantes figuraron antiguos candidatos del partido Winaq, que representan a la resistencia comunitaria contra las hidroeléctricas en Yichk’isis.

En esta contienda electoral, el alcalde Andrés Santizo Gómez buscó la reelección con el partido Vamos. En 2019 ganó la alcaldía con el partido Unión del Cambio Nacional (UCN), de Mario Estrada, condenado en Estados Unidos por narcotráfico.

En esa ocasión, según los partidos opositores, el candidato llegó a la alcaldía en un proceso que fue señalado de fraudulento, sus simpatizantes habrían sido los responsables de la destrucción de papeletas que exacerbaron un conflicto ya enraizado en el municipio.

A pesar de que la población exigió una nueva elección, el TSE no accedió y declaró ganador a Santizo Gómez, quien ya venía formando parte de la corporación municipal entre 2016 y 2020 -dirigida por el alcalde Andrés Alonzo Pascual Alonzo Alonzo- como concejal 2, electo por el Partido Patriota (PP).

Los Alonzo, un clan familiar que ha tenido el control de la municipalidad de San Mateo Ixtatán de 2003 a 2015. Una familia que ha tenido el poder local durante 20 años.

Para estas elecciones, el partido Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) postuló a Pedro Pablo Lucas como candidato a alcalde, pero quedó en tercer lugar. El aspirante forma parte de la actual corporación municipal ocupando el cargo de concejal primero, electo por el partido Winaq, agrupación que perdió la elección por 327 votos en 2019. Pablo Lucas también pertenece a una comunidad de la zona alta, llamada Xek’el.

El partido Prosperidad Ciudadana también postuló a Gaspar Gómez Gómez, alias Chato Gómez, un migrante y empresario local, quien incursionaría en la política por primera vez. Es de la región del área urbana junto con el resto de los candidatos y uno de los que acumuló una buena intención de votos, pero la anulación del partido y del candidato presidencial tiró por los suelos su participación.

Por su parte, el partido Winaq postuló a Mateo Pablo Ramos, quien fue integrante de la Comisión Comunitaria de Ambiente y Recursos Naturales (CCARN), en 2012, y es un opositor a las operaciones de proyectos hidroeléctricos. También es su primera participación en un proceso electoral.

El partido Victoria postuló a Sebastián Gómez Marcos, mientras que el partido Visión con Valores (Viva), postuló a Domingo Mendoza Andrés como candidato alcalde, quien por segunda ocasión intentó ocupar la silla edil, ya que en el proceso anterior fue candidato de Winaq. Sin embargo, esta vez también se quedó en segundo lugar.

Podemos, el partido de Roberto Arzú, postuló a Santiago Eliseo Mauricio González, pero, el TSE no autorizó su inscripción por razones desconocidas.

¿Qué pasó en el día de las elecciones?

El 25 de junio, algunos pobladores del municipio denunciaron que el partido Vamos, por el cual el alcalde Andrés Santizo Gómez buscó la reelección, realizó ofrecimientos de Q1 mil a cambio de votos. “Eran dos personas quienes pagaron el dinero en efectivo, pues lo hicieron con un listado que tienen de cada comunidad con el número del DPI, antes de emitir el voto”, explicó en su idioma Chuj una señora de la aldea Bulej, quien habló con Prensa Comunitaria bajo la condición de omitir su nombre.

La señora también contó que fue obligada por las Madres Guías, del programa de ayuda social que otorga el Ministerio de Desarrollo Social (MIDES), a votar por el alcalde. “Ellas fueron las que nos obligaron a votar por el partido Vamos, bajo amenaza, de lo contrario nos quitarían la ayuda económica que da el gobierno”, denunció.

Además de ese pago, en el municipio se entregaron alimentos en las sedes de los partidos, casas de algún líder o espacios públicos. “Lo hacen todos los partidos y no es necesario ir a decir que vamos con ese partido, pero tampoco decimos que vamos por otro”, comentó uno de los pobladores de San Mateo Ixtatán.

Ambas actividades, consideradas parte de la política del municipio, no propiciaron mayores altercados. Uno de los pocos que se reportaron en la región fue un conato de pelea entre los simpatizantes del partido Viva y Victoria, ya que ambas sedes, están en el camino a un centro de votación. Se dio una pequeña discusión, pero la misma no escaló a pelea porque lograron separar a los simpatizantes que se increpaban.

Otro de los incidentes se dio en el Instituto Yinatil Nab’en (semilla de la sabiduría), cuando a las 21:30 horas, un grupo de aproximadamente 150 simpatizantes del partido Vamos se presentó para “custodiar” el centro de votación. También se reportaron agresiones verbales en contra de algunos fiscales y restricciones a periodistas locales y de Prensa Comunitaria.

Los simpatizantes del partido Vamos, de Andrés Santizo Gómez, también restringieron el acceso a la prensa en algunos centros de votación, donde se realizó el conteo de votos la noche del 25 de junio.

Al finalizar el conteo de votos, el partido oficial Vamos logró colocar al alcalde, dos síndicos y cuatro concejales titulares, mientras que el partido Viva consiguió dos concejalías titulares y la UNE, una.

El concejo municipal estará encabezado por el alcalde Andrés Santizo Gómez; los concejales I, II, III, IV, V, VI y VII, Juan Hernández Juan, Andrés Gómez Hernández, Andrés Paiz Pérez, Pascual Domingo Jorge, Juan Gómez Pérez, Felipe Carmelo Domingo y Andrés Silvestre Gómez. Y por los síndicos I y II, Felipe Pérez Alonzo y Juan Mendoza Baltazar.

La relación de Santizo Gómez

Durante la actual gestión de Santizo Gómez, las aldeas de la microrregión de Yichk’isis no recibieron ninguna ayuda municipal. La reparación de sus caminos que conectan al municipio se realizaron con apoyo de migrantes y mano de obra comunitaria.

Las autoridades comunales han señalado al alcalde como un aliado de las hidroeléctricas y del gobierno. En 2018, Santizo Gómez participó activamente en la firma del Acuerdo de Paz entre el consorcio de diálogo, que dirigió el asesor del vicepresidente Castillo, Arnoldo Noriega, y la gente simpatizante de las hidroeléctricas para justificar la operación de estos proyectos en la región.

El presidente Alejandro Giammattei, cuando asumió el poder, el primer municipio que visitó fue San Mateo Ixtatán. Llegó al lugar para respaldar el acuerdo de paz que trabajó la empresa con sus simpatizantes y la municipalidad. En su visita aprobó este acuerdo como una política de Estado, misma que calificó como un modelo de desarrollo a seguir en Guatemala.

El mandatario llegó el 25 de enero de 2020, en el centro del municipio junto a Miguel Martínez, Guillermo Castillo, actual vicepresidente; la fiscal general del Ministerio Público (MP), María Consuelo Porras Argueta; la presidenta del Organismo Judicial, Silvia Patricia Valdez Quezada; el obispo de Huehuetenango y cardenal de Guatemala, Álvaro Ramazzini.

Además, estuvieron presentes varios de los ministros de Gobierno, Antonio Malouf, de Economía; el ministro de la Defensa, Juan Carlos Alemán Soto, entre otros. Un acto similar que se vivió en está región fue cuando el expresidente Otto Pérez Molina llegó a Santa Cruz Barillas, en 2012, y militarizó el territorio para garantizar la construcción de las hidroeléctricas, en ese entonces de la transnacional española Ecoener Hidralia Energía.

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El conflicto de las hidroeléctricas

La construcción de hidroeléctricas desde hace más de 10 años es un añejo problema con el cual tienen que lidiar la población de San Mateo Ixtatán y, que además, generó divisiones entre las comunidades. El municipio está conformado por la cabecera municipal, 49 aldeas, 19 caseríos, 13 cantones y dos parajes.

Las generadoras de hidroeléctricas San Mateo y San Andrés, de la empresa Energía y Renovación, S.A., que fueron anunciadas como un modelo de desarrollo provocaron animadversiones entre la comunidad.

En marzo de 2022, la empresa perdió su financiamiento. Fue sancionada por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) por violar los derechos de los pueblos indígenas del municipio.

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Andrés Santizo Gómez fue uno de los operadores de las hidroeléctricas de la familia Mata Monteros y Mata Castillo, una corporación que tienen el control de la empresa Pepsico en Guatemala. Santizo Gómez formó para de una oenegé que se llamó Trece Democracia y con la cual suplantó a la sociedad civil de San Mateo Ixtatán, para promover el acuerdo entre Giammattei y las hidroeléctricas.

Una estrategia de la mano de Arnoldo Noriega Pérez, un exguerrillero, que dirigió dos empresas del expresidente del Congreso Pedro Muadi Meléndez, durante el gobierno del Partido Patriota (PP) con el expresidente Otto Pérez Molina. Noriega estuvo al frente del consorcio “Paz, desarrollo y cultura”.

En juego siguen estando las hidroeléctricas en la región norte de Huehuetenango, para la corporación empresarial, la municipalidad de San Mateo Ixtatán sigue siendo una pieza clave, especialmente cuando del respaldo y protección de los intereses de Carlos Enrique Mata Castillo, presidente de The Central American Bottling Corporation (CBC), y considerado uno de los 12 millonarios más importantes de Centroamérica, según información de El Observador.

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