Por Prensa Comunitaria
Hoy, 27 de abril se cumplen 365 días de la resistencia universitaria contra el fraude electoral que impuso a Walter Mazariegos Biolis como rector de la Universidad de San Carlos de Guatemala (USAC). La violencia, criminalización, intimidación, cierre al diálogo, despidos laborales y mantener capturado el padrón estudiantil para evitar relevos de las autoridades ha sido la dinámica del rector de facto. Mientras que la resistencia universitaria se mantiene.
“O todos o ninguno” fue la consigna del 27 de abril de 2022 que anunciaba el fraude en la elección a rector de esa casa de estudios. Consigna que gritaron estudiantes, profesores y profesionales, al mismo tiempo que protegían las instalaciones del MUSAC para evitar que la sesión de elección a rector se llevará a cabo y forzar una nueva convocatoria a elecciones.
Las elecciones para elegir a los 170 electores que tendrían la responsabilidad de votar por nuevo rector de la USAC para el período 2022-2026 fueron viciadas, desde el acarreo de estudiantes hasta la exclusión de 35 personas para que no participaran, habiendo sido electas democráticamente.
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El 26 de abril, cerca de las 8 de la noche, los electores de estudiantes de la Facultad de Medicina, electores independientes de Faculta de Medicina Veterinaria y Zootecnia, electores de las organizaciones Avante y SOSUSAC realizaron una conferencia de prensa en el aula magna de la Facultad de Arquitectura, denunciando el fraude y haciendo el llamado a defender la autonomía universitaria.
Horas antes a esta conferencia de prensa, el candidato Luis Suarez retiró su candidatura para la rectoría. Hoy, Luis Suárez es el candidato a vicepresidente por el partido oficial, Vamos.
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Uso de la violencia para reprimir a estudiantes
Fue el 14 de mayo de 2022, cuando se consumó el fraude en la elección a rector en el Parque de la Industria, gracias a un amparo provisional dado por la Sala Quinta de lo Contencioso Administrativo constituida en Tribunal de Amparo, el cual fue interpuesto por un elector de Walter Mazariegos.
Con fuerte presencia policial se bloqueó la entrada para impedir que los electores que representaban la oposición no ingresaran al Parque de la Industria y ejercieran su voto en la elección. Sin embargo, dejaron ingresar a 71 electores, autoridades del Consejo Superior Universitario (CSU) y otras personas afines.
El fraude en la USAC y el respaldo del gobierno central dio su primer fruto: el nombramiento de Héctor Hugo Pérez Aguilera como representante de la USAC ante la Corte de Constitucionalidad (CC). Esto sucedió el 20 de junio en el hotel Tikal Futura. Los estudiantes trataron de impedir la elección, y fueron reprimidos nuevamente por la Policía Nacional Civil (PNC).
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El 4 de agosto del año pasado, son reprimidos otra vez los estudiantes. Esta vez la violencia fue liderada por las mismas autoridades universitarias que enviaron grupos de choque. Personal de la Dirección General de Investigación (DIGA) dirigidos por Luis Pedro Ortiz, apoyados por un grupo afín a Walter Mazariegos, rector de facto, intentaron ingresar de manera violenta a las instalaciones del Campus Central para recuperar las instalaciones que fueron tomadas por estudiantes desde el 19 de mayo, que rechazan el fraude llevado a cabo por Mazariegos.
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El 20 de febrero de este año, grupos de choque ingresaron violentamente al Centro Universitario de Occidente (CUNOC), portando capuchas negras, armados con palos, armas punzantes y lanzando amenazas de llevar armas de fuego.
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Las estrategias de represión de Walter Mazariegos a lo interno de la universidad hacen recordar las estrategias usadas en los años ochenta para acallar las voces disidentes. La violencia psicológica ha sido la práctica del rector de facto ante la resistencia estudiantil, enviando mensajes que serán desalojados a la fuerza por el Ministerio Público (MP) de María de Consuelo Porras, o que ya tienen orden de juez para el desalojo. Así como la criminalización de estudiantes a través de denuncias penales.
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Otra manifestación de la intolerancia del rector de facto es que con la mayoría de los votos expulsan al representante estudiantil ante el CSU, Camilo García, por llamarlo usurpador en una reunión del Consejo. El estudiante logra un amparo favorable para su reinstalación como autoridad, y las mismas autoridades se niegan a dar trámite al mismo.
Una justicia a la medida del rector usurpador
El 27 de abril de 2022 se interpusieron los primeros amparos debido a que los electores del Colegio de Químicos y Farmacéuticos, Colegio de Ingenieros Agrónomos de Guatemala, Colegio de Médicos y Cirujanos, los estudiantes de la Facultad de Agronomía fueron excluidos por procedimientos fuera de la normativa universitaria y decisiones tomadas por el entonces, secretario general, Gustavo Taracena. Más de 20 amparos se han interpuesto en el sistema de justicia, sin embargo, ninguno ha trascendido.
Hay que recordar que casi una veintena de funcionarios cercanos al presidente Alejandro Giammattei en el sector justicia y en otras instancias sobre las que la USAC tiene influencia, habrían urdido el fraude electoral en esa casa de estudios superiores y utilizado su influencia y poder para bloquear una serie de amparos y apelaciones que impedirían que Walter Mazariegos Biolis tomara la Rectoría de facto, de acuerdo con diversas fuentes consultadas.
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Protesta con propuesta
En agosto se creó la Coordinadora General de Estudiantes (CGE). La primera propuesta fue plantear el diálogo con autoridades legítimamente electas para encontrar una salida a la crisis universitaria. Sin embargo, a los integrantes del Consejo Superior Universitario no les interesa dialogar, ya que sería una fisura al poder de facto que sustenta Mazariegos.
“La respuesta del CSU ha sido, reiteradamente, desconocer a los grupos estudiantiles organizados en la Coordinadora General de Estudiantes y a otros sectores, e ignorar al sector docente y personal administrativo y de servicios”, señaló un grupo de docentes en un comunicado publicado en redes sociales el 13 de diciembre.
Respecto a estas peticiones, algunos miembros del CSU que apoyan la resistencia contra el fraude electoral, pusieron en la agenda del Consejo las solicitudes del sector estudiantil, pero al votar, 24 de los 42 consejeros que lo integran rechazaron las peticiones, cita el Frente Universitario de docentes.
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La crisis en la USAC no es nueva. Al menos esta del fraude ha llegado al límite nunca antes vista. También se destaca que en febrero de 2021 capturaron al rector en ese entonces Murphy Paiz y al exrector Estuardo Gálvez, debido a su involucramiento en el caso de comisiones paralelas en donde se negociaban los puestos a magistrados de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) y de Apelaciones. Este hecho hace que, en menos de un año, en la USAC hayan pasado tres rectores en funciones, un fraude electoral y la imposición de un rector de facto.
