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El Tribunal Supremo Electoral (TSE) es cuestionado por decisiones que favorecen a candidatos señalados de corrupción, por otro lado, niegan la participación de binomios como el conformado por Thelma Cabrera y Jordán Rodas, del partido MLP.

Por Alexander Valdéz

El analista político Luis Fernando Mack, en entrevista con Prensa Comunitaria, habla sobre el escenario que se tiene para las elecciones generales previstas para este año, a dos semanas del cierre de las inscripciones.

Mack considera que las recientes resoluciones de los magistrados del Tribunal Supremo Electoral (TSE), solo han contribuido a incrementar esa desconfianza ciudadana del evento electoral previsto para este año.

¿Qué lectura le da a las recientes resoluciones del TSE?

Obviamente el Tribunal sigue abonando a la desconfianza ciudadana, que en alguna medida muchos sectores han expresado. No existen criterios unificados sobre a quién rechazar y a quién inscribir.

En este caso se acepta la inscripción de este personaje (Manuel Baldizón) y se rechaza, por ejemplo, la de Jordán Rodas del partido MLP. Todo se basa en un principio de idoneidad, pero básicamente es una interpretación que se hace, porque la constitución y las leyes vigentes no establecen criterios claros en ninguno de los casos.

¿En las elecciones de este año se incrementó la falta de credibilidad al TSE?

Por supuesto, ha aumentado porque las dudas aumentaron en 2019, justamente con los errores en el procesamiento de datos, no se demostró nunca el fraude pero quedó esa imagen. El segundo elemento que contribuye al desgaste es el entorno institucional, como la cooptación que muchos analistas han señalado, incluyendo el fraude en la Universidad de San Carlos de Guatemala (USAC), que se anticipó como el mecanismo que se pudo haber utilizado en este proceso electoral, ya se anticipó que iban a descalificar algunos actores por la vía legal.

Así que, el cuadro no podía ser más perverso y problemático como ahora. No es solo lo que ha hecho el TSE, sino todo el entorno institucional y legal que rodea las elecciones de este año.

¿Cuál es el riesgo más grande con la falta de credibilidad del TSE?

El riesgo más grande es que haya un desconocimiento de las elecciones y que ese desconocimiento lleve a violencia, me parece que son los dos riesgos más temidos por analistas. Lo que implicaría un quiebre institucional.

¿Cómo debe accionar la ciudadanía?

No dejarse llevar por lo que en alguna medida se está diciendo. Hay que ver cómo se desarrolla el evento electoral y esperar a que en alguna medida haya un consenso, entre las organizaciones de sociedad civil como de los entes que están acompañando el proceso electoral.

¿Considera que a partir de los cuestionamientos disminuya la intención del voto? 

Es quizá lo que se está por dilucidar, hay muchas posibles consecuencias en un entorno electoral. Puede ser que haya más violencia o que desmotiva a los ciudadanos a emitir su voto.  La verdad puede que haya consecuencias y obviamente todas no son positivas en alguna medida.

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