Dos de los 12 periodistas ahora desterrados por la dictadura son fundadores de la Red Centroamericana de Periodistas, creada en Antigua Guatemala en noviembre de 2022. Ellos son: Carlos Fernando Chamorro, a quien se le han otorgado reconocimientos como el Premio Ortega y Gasset, y Wilfredo Miranda, corresponsal del diario El País de España y fundador del medio digital Divergentes.
Por Simón Antonio Ramón
La Red Centroamericana de Periodistas (RCP) manifestó su repudio ante la acción de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo al desterrar a 94 nicaragüenses el pasado miércoles 15 de febrero. La red de periodistas considera esta medida “un acto de intimidación contra aquellas voces críticas, como el caso de cientos de periodistas nicaragüenses que ejercen desde el exilio para informar la realidad de su país a través de plataformas, y constituye una clara afectación a la libertad de expresión”, señala la RCP.
Dos de los 12 periodistas ahora desterrados por la dictadura son fundadores de la Red Centroamericana de Periodistas, creada en Antigua Guatemala en noviembre de 2022, Carlos Fernando Chamorro a quien se le han, otorgado reconocimientos como el Premio Ortega y Gasset, y Wilfredo Miranda, corresponsal del diario El País de España y fundador del medio digital Divergentes.
Frente al autoritarismo sale al claro la Red Centroamericana de Periodistas
Las y los otros diez periodistas son Luis Manuel Chavarría Galeano, de Café con Voz; Jennyfer Tatiana Ortiz Castillo, de Nicaragua Investiga; Patricia Amanda Orozco Andrade, de Onda Local; Álvaro Valentín Navarro, de Artículo 66; José David Quintana García, de Boletín Ecológico; Aníbal Enrique Toruño Jirón, de Radio Darío; Santiago Antonio Aburto Obando, de BTN Noticias; Gema Serrano Morales, de una radio local; Sofía Isabel Montenegro Alarcón, de Confidencial y el bloguero Manuel Díaz Morales, de Bacanal Nica.
La RCP manifestó su solidaridad con el gremio periodístico nicaragüense y pidió a la comunidad internacional prestar atención a la región. “Urge a la comunidad internacional a establecer esfuerzos de protección y fortalecimiento del periodismo libre e independiente en la región centroamericana, frente a gobiernos que podrían replicar las prácticas antidemocráticas del régimen Ortega-Murillo”.
El 6 de febrero la dictadura desterró también a 222 presos políticos, varios estaban en prisión desde que comenzó la represión en los últimos cinco años. A todos (las 316 personas en total) les ha sido retirada su nacionalidad, según los tribunales que dan a conocer los fallos.