Por Francisco Simón Francisco
La empresa Energía y Renovación S.A. tiene a su cargo la construcción de dos plantas hidroeléctricas en la microrregión de Yichk’isis y para lograrlo pretenden desviar los ríos: Yalwitz, Pojom y Q’eq Sat (río negro). Los afluentes abastecen a la población de ocho aldeas y cuatro caseríos que conforma la microrregión.
El agua es utilizada por las comunidades para consumo, riego para los cultivos de frijol, milpa, café y cardamomo, básicos para la subsistencia y sobrevivencia.
Históricamente, los pobladores de esta microrregión han mantenido una relación armoniosa con la tierra y los ríos, entienden la defensa del territorio y el agua como parte de su cotidianidad.
Para esta microrregión plurinacional de las naciones Chuj, Q’anjob’al, Akateco y mestizo la defensa de los ríos ha provocado costos de persecución penal y discursos de criminalización en las comunidades por operadores de la empresa.
Por la defensa del territorio y sus recursos naturales, Julio Gómez Lucas, autoridad Maya Chuj de San Mateo Ixtatán, Huehuetenango, enfrenta un proceso penal, acusado de tres delitos, desde el 13 de noviembre de 2017.
Aunque el proyecto extractivo funciona con financiamiento de capital extranjero, principalmente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), los dueños son los hermanos Castillos de la Cervecería Gallo en Guatemala.