Por Aj Ral Ch’och’
Siete comunitarios de la finca Chabiland, del área sur del municipio del Estor, Izabal, fueron notificados el 4 de agosto, por el Ministerio Público (MP) para que presenten su declaración testimonial “por delito de usurpación”, pese a que existe una solicitud de diálogo para que se pueda esclarecer la certeza jurídica de los terrenos que habitan.
También se citó a la autoridad comunitaria de la comunidad Chineval, Juan Pérez, quien denunció un incidente donde un niño resultó gravemente herido en la cabeza, por una piedra que rodó de un terreno inclinado donde pasaban los elementos del Ejército y de la Policía Nacional Civil (PNC), mientras realizaban un patrullaje cerca de la comunidad.
En la finca Chabiland, se siembra palma aceitera de la empresa NaturAceites y además viven 100 familias, que han denunciado intimidaciones por elementos de las fuerzas de seguridad durante el estado de prevención decretado recientemente.
Piden certeza
En mayo de este año, representantes de la comunidad sostuvieron una reunión con el gobernador departamental, Héctor Morales Alarcón, a la que también asistieron representantes de la Iglesia presbiteriana de la comunidad, de la empresa NaturAceites, de la Comisión Presidencial Coordinadora de la Política del Ejecutivo en materia de Derechos Humanos (Copredeh), la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) de Izabal y la municipalidad del Estor, en las instalciones del Consejo Nacional de Areas Protegidas (Conap) de Puerto Barrios, Izabal.
Según consta en el acta 35-2020, en esa reunion se abordó la problemática que enfrentan los comunitarios por la falta de certeza sobre la tierra donde viven. Además, solicitaron a las autoridades estatales que se pueda delimitar con claridad en el Registro de Información Catastral (RIC), la ubicación de cuatro caballerías de terreno que la Iglesia presbiteriana compró para la comunidad en 1983.
Durante la cita, el representante de la empresa NaturAceites solicitó a los comunitarios que se retiraran del lugar que habitan, porque “están cometiendo actos ilícitos”. No obstante, el representante de la municapalidad del Estor, pidió que se continuara con el diálogo para alcanzar acuerdos.
Según los comunitarios que viven en la finca Chaviland, el terreno tiene siete caballerías con 17 manzanas, pero “en 1983 la Iglesia evangélica presbiteriana de la aldea adquirió el derecho de las tierras de esta finca y tenemos los documentos”, expresó un comunitario, que por temor a represalias pidió omitir su nombre. Asimismo, se sabe que la Iglesia también compró las tierras de la comunidad Colonia Santiaguito ese mismo año.