A pesar de la consulta comunitaria realizada en 2013, el MEM ha otorgado al menos tres licencias para explotación en Totonicapán. Dos en San Cristóbal El Alto (Mercedes Son Coxaj y Arenera Los Sánchez) y otra en el caso de Totonicapán (Mina Paxtoca).
Por Hugo Bulux
Este 22 de septiembre, autoridades ancestrales conmemoraron los diez años de la consulta comunitaria de buena fe, realizada el 1 de septiembre de 2013, en la que 54 mil 230 personas maya K’iche’ de Momostenango, Totonicapán, dijeron “no a la minería”.
Aunque el Estado de Guatemala ha declarado que las consultas comunitarias no son vinculantes, la conmemoración surgió como un recordatorio de que los pueblos originarios siguen manteniendo la misma postura contra las propuestas extractivistas, que persisten en querer ingresar al territorio y explotar los bienes naturales, con impactos en la contaminación de los recursos y la agudización de la desigualdad social.
En el marco de la conmemoración, el Consejo de Autoridades Ancestrales y Principales de la 32 comunidades y la Coordinadora de Organizaciones Indígenas de Momostenango realizó una actividad pública bajo la energía del nawal 5 Kej , nawal de la autoridad, de la vara y de la justicia.
#Totonicapán ✊🏽 Conmemoran los 10 años de la consulta comunitaria de Momostenango
1️⃣ El Consejo de Autoridades Comunitarias y Ancestrales se reunió para conmemorar los diez años de la consulta comunitaria de buena fe, realizada el 1 de septiembre de 2013.
📸 Hugo Bulux pic.twitter.com/HHZ2TLZgeF
— Prensa Comunitaria Km169 (@PrensaComunitar) September 22, 2023
En la actividad estuvo presente el alcalde municipal de Momostenango, Santiago Vicente, quien invitó a la población a continuar protegiendo los bienes naturales del pueblo de “Xolmumuz” (nombre original en idioma K’iche’ de Momostenango).
También estuvieron presentes el alcalde municipal de San Francisco el Alto y el diputado electo por el departamento de Totonicapán, Alberto de León Benítez, a quien las organizaciones le pidieron que, cuando asuma como parlamentario, abogue por respeto a la voluntad del pueblo.
De León abordó el tema diciendo que el principal problema ha sido que el Estado no ha exigido la realización de estudios de impacto ambiental de los proyectos extractivos, que intentan adentrarse en la región y reafirmó la importancia de realizar las consultas comunitarias.
Además, se comprometió a pedir informes trimestralmente, al Ministerio de Energía y Minas (MEM) sobre licencias mineras existentes y las pendientes.
Sin embargo, la realidad de 2013 sigue siendo la misma 10 años después: el Estado sigue sin consultar a los pueblos. Solo en 2022, Totonicapán ha registrado seis solicitudes de licencias de exploración minera, entre estos el oro, plata, níquel, cobalto, cromo, cobre, plomo de zinc, antimonio, cadmio, platino y tierras raras, de acuerdo al presidente del Consejo Departamental de Autoridades Ancestrales, Patrocinio López.
El MEM ha otorgado al menos tres licencias para explotación en Totonicapán. Dos en San Cristóbal El Alto (Mercedes Son Coxaj y Arenera Los Sánchez) y otra en el caso de Totonicapán (Mina Paxtoca).
Los organizadores aprovecharon para denunciar y rechazar la iniciativa 6283, que dispone busca aprobar la Ley para la Protección de Obtenciones Vegetales, también conocida como “Ley Monsanto”.
Por ahora, el Consejo de Autoridades de Totonicapán, mantiene un acercamiento con el binomio presidencial electo del Movimiento Semilla, encabezado por Bernardo Arévalo y Karin Herrera, para promover acciones en defensa de los derechos de los pueblos indígenas que se espera, tengan un impacto en la legislación y en la no concesión de licencias mineras.
