Cuatro países retiraron la candidatura de sus nominados para integrar la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) sin dar motivos. Entre los candidatos a integrar la CIDH figura Stuardo Ralón, nominado nuevamente por el gobierno de Alejandro Giammattei y que genera el rechazo de sectores de DDHH en el país y en la comunidad internacional.
Por Regina Pérez
El panel independiente para evaluar candidaturas a los órganos del Sistema Interamericano de Derechos Humanos (SIDH) manifestó su preocupación por el retiro de la nominación de cuatro personas a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de parte de Estados Unidos, Brasil, Honduras y Perú, países que no explicaron las razones detrás de esta decisión.
Actualmente se realiza el proceso para la elección por la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) de cuatro puestos en la CIDH, en el cual diez estados miembros nombraron a sus candidatos: James Cavallaro por Estados Unidos, Pier Pigozzi, de Ecuador, Estuardo Ralón, por Guatemala, Julissa Mantilla, por Perú, Arif Bulkan, por Guyana y Andrea Pochak, por Argentina.
También fueron nominados Gloria de Mees, por Surinam, Fabio Balestro por Brasil, Lidia Casas, por Chile y Joaquín Mejía de Honduras, según un comunicado de prensa del panel que está conformado por cinco expertas y expertos con experiencia en derechos humanos reconocida internacionalmente.
Sin embargo, los estados de Brasil, Honduras, Perú y Estados Unidos retiraron las candidaturas de Fabio Balestro, Joaquín Mejía, Julissa Mantilla y James Cavallaro. En el caso de los tres primeros lo hicieron después del 23 de marzo, cuando ya había concluido el plazo para nominar.
Según el panel independiente SIDH, llama la atención que los Estados que retiraron las candidaturas de las personas no hayan explicado públicamente las razones y motivos para tomar tal decisión y que la reducción de candidaturas implica una menor posibilidad de lograr un proceso abierto, donde se pueda discutir la idoneidad de las y los aspirantes.
Además, señalaron que estos hechos no se habían producido en anteriores procesos de nominación para los órganos del Sistema Interamericano y podrían limitar y afectar la transparencia y participación de distintos actores interesados en el mismo.
En el caso de Mantilla, explicó en su cuenta de Twitter que la decisión fue del gobierno peruano. “En aras de la mayor transparencia, debo informar que me enteré de esta decisión a través de las redes sociales” señaló en un comunicado de prensa. Mantilla es actual comisionada en la CIDH.
La abogada señaló que en su campaña nunca infringió el artículo 17.2 del Reglamento de la Comisión que impide a comisionadas y comisionados a participar en temas relativos a sus países de origen.
En el caso de Cavallaro, Estados Unidos retiró su candidatura cuatro días después de anunciar su nominación, el 10 de febrero. Declaraciones de Cavallaro sobre el gobierno de Israel y críticas a la influencia de grupos de presión a favor del Estado israelí habrían llevado al retiro de su nominación, según indicaron organizaciones de derechos humanos en su momento, en una carta abierta.
El Panel SIDH recordó que la elección de candidaturas debe de observar el cumplimiento de los requisitos de independencia, imparcialidad, alta autoridad moral y reconocida competencia en materia de derecho humanos, lo cual debe estar fundamento en el examen de trayectoria de las postulaciones.
Las y los expertos indicaron que analizarán la información de la que disponen y al momento de emitir su informe final formularán a los Estados las recomendaciones pertinentes en línea con la preservación y autonomía de las y los comisionados que integran el pleno de los órganos principales del SIDH.
En el caso de Guatemala, el pasado 10 de febrero, el gobierno de Alejandro Giammattei volvió a postular a Ralón para un segundo periodo. Sin embargo, su gestión estuvo marcada por acciones que violentan las normas internas de la Comisión y de Guatemala contra los derechos humanos lo que pone en entredicho su cargo, según se han pronunciado diversas organizaciones de la sociedad civil.
La Asamblea Social y Popular manifestó a través de un comunicado su rechazo a la reelección del comisionado. Entre las razones expusieron que Ralón se ha opuesto al derecho a la consulta de los pueblos e implementación del convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y a la inclusión del pluralismo jurídico en el proceso de reformas constitucionales en 2016.
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La elección de cuatro comisionadas y comisionados para integrar la CIDH está prevista en junio próximo en la Asamblea 53 de la OEA, a realizarse en Washington DC.
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