El pasado martes canceló la personería jurídica de dos universidades nicaragüenses.
Por Isela Espinoza
Un día después de cancelar la personalidad jurídica del Concejo Superior de la Empresa Privada (COSEP) y de las 18 cámaras empresariales que la integran, el régimen de Daniel Ortega dio otro golpe, esta vez a la autonomía universitaria. El martes 07 de marzo el Ministerio de Gobernación, canceló a la Asociación Universidad Juan Pablo II y a la Asociación Universidad Cristiana Autónoma de Nicaragua (UCAN).
Este miércoles, la Universidad Juan Pablo II afirmó en un comunicado que la noticia de la cancelación de su personería jurídica la recibió con “sorpresa y profunda tristeza”. Resaltó que estarán en “permanente comunicación” con la comunidad educativa para informar sobre los procesos a seguir en el traspaso de la casa de estudios a las autoridades nicaragüenses.
En tanto, el Concejo Nacional de Universidades (CNU) garantizó la continuidad académica de los estudiantes de “las extintas universidades” e informó que serán acomodados en universidades que pertenecen a este ente rector.
“Una vez que recibamos de dichas universidades los expedientes y registros académicos, les daremos a conocer las universidades”, dice el documento firmado por el secretario técnico del CNU, Jaime Francisco López Lowery.
Ambas asociaciones universitarias canceladas tienen presencia en diferentes departamentos del país. La ministra de Gobernación, María Coronel, afirma en el acuerdo ministerial que las universidades “están incumpliendo” con sus obligaciones conforme a la ley “por no estar acreditadas en los indicadores de calidad, no reportar sus estados financieros y juntas directivas”. Además, según el régimen tampoco presentaron “aclaraciones” sobre su patrimonio.
El diario digital La Prensa señala que las primeras cancelaciones de universidades iniciaron en febrero del año pasado con la anulación de siete asociaciones universitarias entre ellas la Universidad Politécnica de Nicaragua, uno de los bastiones de la lucha estudiantil durante las protestas de 2018 contra Ortega.
