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Créditos: Prensa Comunitaria
Tiempo de lectura: 2 minutos

Por Miguel Ángel Sandoval

Interesante oír a Arzú despotricar contra el sistema. Cosas veredes. 

El paisito no deja de dar sorpresas. A pesar de estar con la democracia en intensivo, hay siempre novedades. Pero vamos por partes. Uno de los temas más socorridos, es la idea de plantear que se es antisistema y con ello, pensar que se puede tener el apoyo de los millones de chapines encabronados. Resulta que ser de izquierda o progresista o ahora chairo, demanda de cierta coherencia, de un posicionamiento ante los temas más ingentes del país, no solo en época electoral y menos únicamente de manera declarativa.

Si le creemos a Arzú, el país estaría 100 veces mejor si la Cicig hubiera continuado en el país y ofreciéndonos sus famosos jueves, con casos que en cada ocasión constituían verdaderas revelaciones y motivo de alegría ciudadana. Uno de ellos Caja de Pandora, que hizo que el padre del nuevo chairo, encolerizado montara un numerito de machín criollo, amenazando con golpear a los que daban la rueda de prensa. ¿Qué dice de esto nuestro nuevo chairo?

Me parece correctísimo que lanza en ristre, diga que va a dar gratis la electricidad a la gente, pero no dice como, ni cuando, ni dónde. Lo cierto es que basta con plantear la nacionalización y que se bajen los precios a la ciudadanía, con lo cual podríamos estar de acuerdo. Podría iniciar presentando un proyecto de ley de nacionalización, con un diputado en el congreso bastaría para ello.

Con lo de las medicinas el tema es parecido. Si conoce de los precios inflados de las medicinas por varias farmacias, nada le costaría presentar una demanda ante la Diaco, aunque no sirva, y algo semejante ante el MP. De igual forma, un proyecto de ley contra el monopolio de la medicina sería oportuno. ¿Está dispuesto a transitar por esa vía? Con uno o dos diputados le alcanza para ello. Ahí está Alvarito, su hermanito del alma que podría hacerlo.

El expediente del cemento, el azúcar, o el pollo y ahora los huevos, tiene salida que de alguna manera lo entiende el nuevo chairo. Liberar la exportación de pollo, huevo, cemento y azúcar es algo que tendría nuestro apoyo. Aunque parece que en buena medida sus declaraciones son de “populismo electoral”. A no ser que, de forma clara, el programa de Podemos y todos sus candidatos, se expresen por todo el país de esa forma. ¿Qué hará con los monopolios familiares? Si nos da una respuesta coherente, quizás entonces le creamos algo.

La coincidencia mayor es que si parece que la crisis del sistema está enviando a sus cachorros a luchar contra éste. No sé si es porque pierden privilegios, o si es porque se han visto desplazados de otros negocios, pues pensar que en esos grupos haya alguien que se conmueva con las penurias de la gente no parece que sea algo normal o corriente. No estamos en la época de los cristianos de los liceos que abrazaron la lucha popular. Es otro momento.

Y no menos importante, es la cooptación de las instituciones del gobierno por la corrupción. La caja de pandora es un ejemplo. Construcción y corrupción es otro. De igual manera el financiamiento ilegal de las campañas electorales por los señoritos del CACIF, lo cual por cierto no menciona el nuevo chairo.

Si no fuera por un tufillo demagógico, el apoyo a la participación de Telma Cabrera, y si a él mismo lo inscribieran, colocaría su candidatura,  en una posición de salida más equilibrada. De momento, a falta de acciones concretas, el chairo Arzú, nos queda a deber.

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