Mientras continúa el silencio del gobierno central frente a las peticiones de los transportistas, que demandan una solución a la escalada de los precios de combustibles y la canasta básica; este jueves decenas de policías agredieron y desalojaron a manifestantes en Salcajá, Quetzaltenango.
Por Shirlie Rodríguez
Por cuarto día consecutivo, otra jornada de manifestaciones se mantuvo en las rutas del país, principalmente del occidente. La petición de los transportistas es que se tomen acciones económicas por parte del gobierno para reducir el costo de los productos de la canasta básica y del combustible.
A diferencia de las jornadas anteriores, este jueves alrededor del mediodía, un contingente de antimotines de la Policía Nacional Civil (PNC) y elementos del Ejército, se presentaron al municipio de Salcajá, en los alrededores del monumento al Emigrante; en ese lugar un grupo de transportistas se agrupaba, respaldando el movimiento a nivel nacional.
La PNC empezó a retirar algunos objetos que se encontraban en la carretera, tales como las cintas que evidenciaban la toma del lugar, para que después ingresaran las fuerzas antimotines que con sus escudos se acercaban a las personas manifestantes, para obligarlas a retirarse.
Uno de los transportistas, identificado como Sergio Eleuterio López Vásquez de 41 años fue detenido durante las acciones. El argumento de la PNC es que el transportista supuestamente había agredido a uno de los elementos policiales; la detención provocó que los manifestantes reaccionaran para exigir la liberación de su compañero.
“Estamos aquí para garantizar la libertad de manifestación, pero también la libre locomoción de la población guatemalteca”, dijo uno de los jefes de PNC que llegó a Salcajá a retirar a las personas del lugar.
La exigencia de liberar al transportista no se escuchó, además los antimotines lanzaron una bomba lacrimógena para dispersar a quienes pedían que, a cambio de su compañero, liberaban el lugar.
Las personas que tenían tomado el lugar decidieron retirarse del punto para acuerpar a quienes se encontraban en La Morería en Totonicapán. La PNC y el ejército también se movilizaron a ese punto.
En La Morería, las personas que manifestaban identificaron que en una ambulancia se conducía el gobernador de ese departamento José Pablo Ordoñez. “El gobernador es incapaz de tomar decisiones. ¡Que renuncie! ¡por qué está paseando en la ambulancia, para eso no sirve!”, gritaban las personas indignadas por el hecho.
El funcionario dijo que iba para la capital y la ambulancia fue el medio que encontró para movilizarse. Agregó que está designado a una comitiva para dar seguimiento al tema de las manifestaciones y aseguró que la PNC no ha utilizado la fuerza; contradiciendo lo que ocurrió horas antes en Salcajá.
Los manifestantes confrontaron al gobernador, le exigieron su renuncia, y advirtieron que, si se presenta a la Gobernación el próximo lunes, tomarán esas instalaciones.
Los Bomberos Municipales Departamentales de Salcajá reportaron la atención de una persona que resultó herida después de que la PNC desalojó a los manifestantes. El bombero Juan Carlos Maldonado dijo que esa persona no necesitó ser trasladada a un centro asistencial.
Edwin Velásquez, representante de taxistas en Quetzaltenango lamentó las acciones de la PNC al agredir a los manifestantes, porque esto evidencia que responden a los poderes económicos del país y no a las exigencias de la población. “Es algo preocupante, estamos haciendo una manifestación pacífica y ellos están actuando de manera violenta. Esto es porque dan cumplimiento rápido a las peticiones de los sectores poderosos del país”, dijo.
El gobernador de Quetzaltenango se reunió con autoridades del Ministerio de Energía y Minas (MEM), para abordar el tema, pero no dieron declaraciones o información sobre la respuesta que puedan dar a manifestantes.
“Este movimiento no es exclusivamente de beneficio al transporte, necesitamos que la canasta básica baje o que al menos tenga estabilidad. Ayer nos enteramos que la carne incrementó de precio y si no baja el precio del combustible, estos productos se mantienen al alza”, indicó Homero Fuentes, representante de transportistas en Quetzaltenango.
La postura de los transportistas se mantiene firme, mientras no encuentran respuestas y acciones reales, aseguran que no se retirarán del lugar. Un precio tope al combustible es lo que requieren y con esto se puede evidenciar un descenso de los costos de los productos de la canasta básica.