El pasado fin de semana se sumó una nueva jornada de protesta en varios departamentos de Guatemala pidiendo la renuncia del presidente Alejandro Giammattei y de la fiscal general del MP, además los municipios también presentan sus demandas locales.
Por Gilberto Escobar
El pasado sábado 12 de diciembre fue el cuarto fin de semana consecutivo a partir de la jornada registrada del pasado 21 de noviembre, en donde la población se concentró en las plazas y parques de varios departamentos para pedir la renuncia del presidente Alejandro Giammattei y de la Fiscal del Ministerio Público (MP), Consuelo Porras.
La fuerza de organización y movilización de la población se mantiene y a las demandas nacionales también se suman descontentos a nivel locales. En la ciudad de Guatemala el 12 de diciembre la jornada se desarrolló con actividades culturales en la que participaron personas a través del canto y la poesía.
De lo nacional a lo local
Durante la jornada de protestas también se organizaron en tres departamentos: Quetzaltenango, Huehuetenango, Quiché y Cobán.
En Xela, un colectivo de profesionales llevó a cabo la recolección de firmas para a través de ellas pedir la destituir a la fiscal general Porras, además unas 400 personas se reunieron frente a la municipalidad de ese municipio para pedir la renuncia del presidente Alejandro Giammattei, denunciar la corrupción del Congreso de la República y la gestión del MP en la contratación de una fiscal especial que investigara a Juan Francisco Sandoval, fiscal de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI).
Colectivo de profesionales suman esfuerzos para la recolección de firmas en contra de la fiscal del MP:
En el municipio de Coatepeque, Quetzaltenango, un grupo de ciudadanos con pancartas repudiaron la labor de los seis diputados distritales.
En la cabecera departamental de Huehuetenango un grupo de personas se reunió en el parque central para pedir la renuncia del presidente Alejandro Giammattei.
En Tactic, Alta Verapaz, la población pidió la renuncia del alcalde de ese lugar Julio Asigj y del presidente Alejandro Giammattei.
A pesar de que las plazas han sido abarrotadas, José Luís Ramírez, integrante del Consejo maya k´iche´ de Quetzaltenango, analiza que las plazas deben ser apoyadas pero se debe de tener un criterio político de porqué se participa en ellas y se debe dar seguimiento de lo que los pueblos han venido trabajando desde hace muchos años.
Vía telefónica Ramírez apunta que se debe recordar que las convocatorias las realizaron los grupos que se han denominado “camisas blancas”, esa fue una de las razones por las cuales el Comité de Desarrollo Campesino (CODECA) y otros sectores no se sumaron a las jornadas de protesta.
Ramírez puntualizó que “las movilizaciones en los parques y en las plazas se deben de apoyar pero pensar que estas jornadas deben de ir no solo en pedir la renuncia de los diputados, del presidente, o de la fiscal del MP, ese no es el fin, lo que se busca es constituir la asamblea constituyente plurinacional, hay que seguir en las plazas pero con otro discurso”.
¿Que se espera lograr con las manifestaciones en las plazas?
Nelson Ruiz, economista y analista, considera que “la plaza es un ideario, es algo irreal, las jornadas fueron convocadas por los sectores poderosos que habían comprobado que Alejandro Giammattei estaba fortaleciendo solo a un grupo, pero al grupo del vicepresidente no”.
Para Ruiz, las luchas de los grupos de estudiantes y de la población son legítimas pero en las últimas jornadas han perdido fuerza, añade que se debe desmitificar la plaza y determinar que es una creación ficticia de los grupos de poder, son iconos que ayudan a desmovilizar las verdaderas luchas populares.