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Créditos: David Toro.
Tiempo de lectura: 3 minutos

Texto y fotografías: David Toro

15 de noviembre de 2018

El Tercer Encuentro de Tejedoras reunió a decenas de mujeres mayas de toda Guatemala que se organizan para defender el arte y las raíces que resguardan sus tejidos. Ejemplo de lucha contra el racismo que sufren los pueblos indígenas, la defensa de sus textiles, que han sido explotados e industrializados por empresas nacionales e internacionales.

El colorido de los güipiles, gorras, bolsas, collares, aretes y muchos otros distintivos del arte de las tejedoras indígenas, se apoderaron del Museo de la Universidad de San Carlos este miércoles. Desde el 2015, la Asociación  Femenina para el Desarrollo de Sacatepéquez (AFEDES), realiza un encuentro nacional de tejedoras, que reúne a mujeres de toda Guatemala, la intención es fomentar la defensa de la propiedad intelectual colectiva de los tejidos bordados por mujeres artistas del tejido.

Angelina Aspuac, una de las organizadoras del Encuentro de Tejedoras.

Durante la actividad, Angelina Aspuac, una de las organizadoras, portaba un güipil de su pueblo, Santiago Sacatepéquez. Angelina comentó que la defensa de los tejidos, es fundamental. Existen empresas que se han aprovechado del trabajo de las mujeres y han lucrado grandes cantidades vendiendo diseños con las ideas originales de estas artistas, que en su mayoría no viven exclusivamente del tejido, deben trabajar en otras actividades durante el día y tejen a altas horas de la noche cuando el resto de gente descansa.

Los güipiles resguardan entre su bordaje gran esfuerzo y dedicación, pues un mal conteo de los hilos puede dejar inservible un trabajo.

Angelina Aspuac: “Muchas empresas e intermediarios se aprovechan de la pobreza; muchas tejedoras deben vender barato su trabajo, porque no hay recursos y buscan la forma de alimentar a su familia, y estos intermediarios son los que lucran bastante, estas ganancias deben ser de las mujeres.”

Pero no se trata únicamente del aspecto económico. Angelina resalta que consideran que los güipiles, el trabajo de las tejedoras, traen consigo una historia de muchos años. Calificó al gobierno de racista, pues ha intentado despojar a los pueblos mayas de su indumentaria y tradiciones. La líder del gremio de tejedoras, aseguro que en noviembre del 2017, con apoyo de asesores legales, AFEDES logro que la Corte de Constitucionalidad emitiera un amparo sobre la falta de protección que existe para sus creaciones artísticas y esperan que en algún momento el Congreso conozca y apruebe la iniciativa de ley 5247 que busca la protección de la propiedad intelectual de los tejidos que realizan estas mujeres.

La exposición de los tejidos seguirá en el MUSAC el resto de la semana. Las tejedoras esperan vender sus productos y hacer consciencia sobre el valor cultural que este patrimonio representa para Guatemala.

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