Por: Carlos Enrique Lix Socop*
La interculturalidad en el modelo de salud incluyente es diferente de la inclusión de las enfermedades culturales por los pueblos indígenas, ya que esto implicaría cambiar en mucho al Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS).
Hasta ahora se ha escuchado que el MSPAS incluirá dentro de su paquete de atención el “mal de ojo” y el “chipe”, enfermedades propias de la cultura maya, que en otra categoría de análisis se conocerían como “enfermedades culturales”, pues solamente se pueden entender dentro de la propia cultura y por sus integrantes. Luego se indica que el personal del MSPAS detectará en las consultas externas o de emergencia –imagino– los posibles casos de mal de ojo y de estar chipe. No se explica cómo los detectaría si el personal desconoce oficialmente tales padecimientos “tradicionales” y de “los indígenas”… Luego indican que al detectarlos, se referirán tales casos a los terapeutas indígenas para su respectiva atención, lo cual me parece atinado para asegurar una atención tal como se indica líneas arriba: desde la cultura originaria de la persona.
¿Cómo detectar los casos y cómo darles seguimiento? Sobre esta parte no se ha dicho nada públicamente, pero conociendo la propuesta de Modelo de Salud Incluyente del Instituto de Salud Incluyente (ISIS), se tratará de establecer una coordinación en paralelo con el modelo de medicina maya en Guatemala, que por cierto se ha descrito ampliamente a través de estudios serios y participativos realizados por la Asociación de Servicios Comunitarios de Salud (ASECSA).
Entonces no se trata de que el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social de Guatemala incluya en sus programas de atención a las personas el modelo de medicina maya, el modelo de medicina garífuna, el modelo de medicina xinca o los otros modelos de atención que existen en la población guatemalteca (todos conformando el sistema de salud en Guatemala), y estos incluye el modelo privado y el modelo del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS). Se trata de coordinar con los terapeutas indígenas, quienes conocen y practican la atención de las enfermedades culturales, para facilitarles las herramientas para mejorar esta atención y así visibilizar estos aportes al sistema de salud en Guatemala, incluyendo la parte de vigilancia y registro epidemiológico de los casos.
Lo que se ha dicho ya es practicado por el Modelo Incluyente de Salud, pero no se ha divulgado lo suficiente para ser comprendido y respetado por la población en general y por el gremio médico y el mismo personal del MSPAS en particular… Se aplaude la iniciativa de darlo a conocer ampliamente para ser implementado como modelo de atención por parte de los servicios de salud del MSPAS.
Sin embargo, quisiera hacer énfasis en que hablar y escribir sobre las enfermedades culturales es diferente que hablar solamente de “mal de ojo” y de “chipe”, estas enfermedades son apenas algunos ejemplos. Existen muchas más y no seremos nosotros, médicos y médicas formadas en las universidades para responder a otro modelo de atención y con otra nomenclatura de enfermedades, quienes las atendamos; aunque si nos sumergimos en las culturas indígenas podremos comprenderlas y atenderlas. No resolveré aquí lo fascinante de las enfermedades culturales. Hay mucho ya compartido sobre el tema, y el propio MSPAS, a través del Programa de Medicina Tradicional ha oficializado un manual y su respectiva guía para conocer sobre la medicina maya en Guatemala. En dicho texto se habla de la clasificación de las enfermedades culturales, que a su vez se dividen en enfermedades naturales, enfermedades sobrenaturales y enfermedades propias de la mujer desde el punto de vista de la cultura indígena maya de Guatemala.
En el manual en mención también se encuentra una clasificación y una descripción de las diferentes especialidades que practican los terapeutas indígenas, que por cierto no solamente se reducen a “curanderos” y “chamanes”, son mucho más que eso. Chamanes o Shamanes son términos que no existen en el vocabulario indígena maya en Guatemala y antropológicamente se han aplicado para el sur de México y para el sur de América. Aquí en Guatemala, si se quisiera hacer un acercamiento a este término se diría “guía espiritual maya”, conocida mejor como Aj Q’ij o “contadores del tiempo”. Curandero es un término que suena peyorativo para la cultura indígena maya. En múltiples discusiones que se tuvieron al respecto dentro del programa de medicina tradicional del MSPAS, y en diversos espacios, facilitados por la sociedad civil en salud, se demandaba que se reconocieran a las y los terapeutas indígenas mayas como “médicos mayas”, pero al entenderse que esto es mucho pedir a un sistema racista y discriminador, se solicita respetar y si es posible comprender que a los terapeutas mayas se les debe conocer como son “Aj Q’omonel” o “Aj K’unanel” o “Los que Curan” en idiomas Kaqchikel y Kiche’ respectivamente.
Darle el lugar que corresponde a la medicina indígena maya dentro del Sistema Nacional de Salud del cual forma parte y es rector el MSPAS es bueno para el país, es un gesto grande para ir transitando de un modelo de salud racista y discriminador hacia un sistema de salud intercultural que transita hacia un modelo de atención en salud incluyente para los pueblos indígenas de Guatemala o Iximulew. Lo que se requiere al respecto es oficializarlo y asignarle mayor presupuesto para que no solo quede en buenas intenciones, en planes pilotos o creación de demandas insatisfechas dentro de la población guatemalteca.
Foto: Carlos A. Gómez. Reportaje Guatemala y Perú: comprometidos con la maternidad
*Doctor (Aj Q’ij) (MSP-USAC)
Facilitador en la elaboración del Manual y Guía Sobre Conociendo la Medicina Indígena Maya en Guatemala, del PNMPyT MSPAS 2002 y 2003.
Facilitador de procesos de sensibilización en Medicina Maya a Personal de Servicios de Salud del MSPAS 2003 y 2004.
Asesor en la descripción del Modelo de Medicina Indígena Maya en la Asociación de Servicios Comunitarios de Salud
Consultor en la inclusión del Modelo de MEidicna Maya en el Primer Nivel de Atención en Salud.
Consultor en el fortalecimiento de la interculturalidad en el primer nivel de atención a la salud, para la Unidad de Atención a la Salud de los Pueblos Indígenas e Interculturalidad del MSPAS, 2011.
Entre otros aportes…