Créditos: Juan Bautista Xol
Tiempo de lectura: 2 minutos

 

Una familia Q´eqchi, de El Estor, Izabal, celebró una ceremonia maya y pidió por el nuevo gobierno de Bernardo Arévalo y Karin Herrera, quienes asumirán el próximo 14 de enero, a las 14:00 horas. Prensa Comunitaria estuvo presente en la actividad y la documentó para mostrarla a sus lectores.
La ceremonia fue realizada a la medianoche del domingo 7 de enero. Ahí, la familia de Juan Xol, pidió a las abuelas y abuelos le den sabiduría al nuevo gobernante, pues ya “estamos cansados de ser excluidos. Nuestros hijos necesitan una buena educación. Necesitamos tener paz en nuestros territorios”.

Por Juan Bautista Xol

Todos los años, la familia Xol realiza una ceremonia Maya (Mayejak) en los primeros días del año, para pedirle al Ajaw “Creador y Formador”, la protección de cada uno de los miembros de la familia, en especial de los niños, niñas y juventud que continuarán sus estudios durante el 2024.

La familia se preparó antes de que llegara el día de la ceremonia, realizando una oración durante una semana, para convocar las energías positivas de los cerros, valles y ríos. Especialmente a los 20 nahuales que representan las energías de cada día.

En la ceremonia, utilizaron velas de diferentes colores, copal pon, ocote, cacao, puros, incienso, flores y otros materiales que son, particularmente, para la protección de la familia. Sin falta, ambientaron con el son de la marimba.

“Debemos esperar la media noche para encender el fuego”, dijo el ajq’ij, “ya que según el calendario Maya cuando marca las 11 de la noche cambia el cargador del día. Es decir, en el calendario gregoriano marca domingo 7 de enero, pero en el calendario Maya marca el Wajxaqib´ Ix, 8 Ix”.

La ofrenda se entrega una hora después del cambio del cargador del día, para que la familia pueda pedir protección y superación. El ofrecimiento fue entregada al nuevo cargador, B´eleeb´ Tz´ikin, Nueve Tzíkin, quien trae buenas energías, explicó el guía espiritual.

El fuego de la ceremonia duró al menos dos horas. El ajq’ij aprovechó el momento para ungir a los niños, niñas, jóvenes y mujeres embarazadas, para que sean protegidos y liberados de las malas energías.

Antes de finalizar la ceremonia, aconsejó a la familia pedir al Ajaw por el nuevo gobierno y así lo hicieron. Luego, compartieron un delicioso caldo de gallinas criollas acompañados por los famosos pochitos, una torta de masa cocida envuelta en hojas de maxán, la cual es muy tradicional en el pueblo Q´eqchi´.

Fotos por Juan Bautista Xol :

COMPARTE