Huehuetenango: dos alcaldes se desentendieron de daños por lluvias por no ganar reelección

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Créditos: José Bautista
Tiempo de lectura: 5 minutos

 

Tras el cese de las lluvias, población del norte de Huehuetenango continua en riesgo por saturación del suelo.

Por Paolina Albani
Con información de Lencho Pez, Tik Laz, Blanca Jiménez, Domingo Misael y Palas Luin

Los departamentos de la Franja Transversal del Norte (FTN) y parte de Huehuetenango quedaron con estragos después de la tormenta Pilar y un frente frio. A poco más de una semana de que pasara la fase más problemática de las lluvias, los alcaldes de algunas comunidades han elegido darles la espalda a sus pobladores, negándoles ayudas para reponer sus pérdidas o para liberar las vías de sus municipios.

Esto se ha traducido no solo en una mayor autonomía y organización comunitaria para resolver algunos de los daños a cuenta de donaciones de los pobladores, sino en una muestra de la venganza política de parte de dos jefes ediles que no lograron la reelección para el período 2024-2028, y que parecen ajenos a la catástrofe que azotó a los municipios del norte de Huehuetenango.

Tras las lluvias, el nivel de riesgo sigue activo, por la saturación de los suelos. Es así que tras 10 días de finalizada la etapa más fuerte de la temporada, casi 200 personas más, entre el 10 y 20 de noviembre, están en riesgo. Las cifras pasaron de 15 mil 556 a 15 mil 746, según datos registrados por la Coordinadora Nacional para la Prevención de Desastres (Conred).

Una revancha entre dos alcaldes

La primera semana de noviembre, la tormenta Pilar y el ingreso de dos frentes fríos por el Caribe guatemalteco, provocaron fuertes lluvias en la Franja Transversal del Norte del 1 al 10 de noviembre, que dejaron más de 4 mil personas afectadas.

Uno de los departamentos más afectados fue Huehuetenango, específicamente la aldea K’isil, en San Juan Ixcoy.

El Consejo Comunitario de Desarrollo (Cocode) de la aldea K’isil informó que fueron evacuadas 63 casas en los días más críticos de las lluvias. Dos de esas casas perdieron sus pertenencias en un deslave. Y se estima que unas 60 viviendas más están en riesgo por encontrarse a la orilla del río.

Aunque el nivel del río ha descendido en los últimos días, el cauce del río K’isil aún no vuelve a la normalidad y esto ha provocado que la tierra, que es de consistencia arenosa, pueda desprenderse por el peso de las casas y provocar deslizamientos.

En un conteo preliminar de daños, la Conred estimó que 16 viviendas sufrieron daño moderado y al menos, 96 personas fueron las afectadas por el desbordamiento. Pese a que las familias fueran evacuadas, ya por estos días, la mayoría ha vuelto a sus viviendas, por el temor constante a perder sus cosas.

Además de esto, en San Juan Ixcoy, las lluvias continúan aunque con menor intensidad y la carretera de terracería, que quedó destruida por las lluvias, fue arreglada por los comunitarios, con sacos de grava y piedras, después de que el alcalde de la localidad Andrés Rafael López, dijera que no brindaría ayuda porque “ya estaba de salida”.

Algo particular del caso de López es que en la primera vuelta electoral quedó en tercer lugar. En primero ganó el abstencionismo con un 53% y le arrebató la alcaldía Juan Alberto Pérez Tercero. A López se le vio celebrar su primer año como alcalde en 2020, cuando azotaba la pandemia por la COVID-19, por un video difundido en redes sociales.

Medidas de prevención

En tanto, los agricultores, al notar que las lluvias no cesarían pronto y que podrían quedar sumergidas, se adelantaron a cortar sus siembras un mes antes, para salvar algo de las cosechas que estarían listas hasta diciembre. En esta parte de Huehuetenango, los campesinos solo siembran maíz una vez al año, así que quienes perdieron sus cosechas han dicho que tendrán que esperar un año completo para recuperarse.

El lunes 20 de noviembre, se reportó que los trabajadores del Centro de Atención a Pacientes (CAP) de San Juan Ixcoy, construyeron un puente de forma improvisada después de que las lluvias e inundaciones derribaran el puente original.

Los trabajadores del centro comentaron que tomaron la iniciativa, pues “veíamos cómo la gente se arriesgaba saltando para cruzar hacia el centro”.

San Juan Ixcoy es uno de los tantos municipios enfrentados, en su caso con Chiantla, por una disputa territorial. En este caso, Chiantla, Buena Vista, San Isidro y Palo Grande reportaron deslaves de lodo.

En la comunidad de San Lucas, también en San Juan Ixcoy, dos casas y una iglesia permanecen en riesgo por estar a la orilla del río. Al menos, ocho personas fueron evacuadas por riesgos de deslaves, refirió el Cocode de la comunidad.

La Conred dijo que hay operaciones de ayuda humanitaria, específicamente, para un puente aéreo que ayudará a conectar a cuatro comunidades que no tienen acceso por vía terrestre en San Pedro Soloma y Chiantla, Huehuetenango

Foto de Lencho Pez

En Santa Eulalia, el 6 de noviembre, se registró que una de las casas de la comunidad quedó soterrada a noche en la aldea Paykonob’, sin pérdida de vidas humanas, luego se supo de la saturación del suelo que provocó un deslizamiento en la ruta RN-9, en el caserío Yucol.

La carretera principal cerca de Chumakte’, límite entre Soloma y Santa Eulalia, las fuertes lluvias han causado derrumbes en la carretera que conecta los municipios de San Sebastián Coatán, San Miguel acatan, San Rafael la Independencia, San Mateo Ixtatán y Santa Cruz Barillas.

Además, se reportó que Nub’ilwitz quedó inundada.

El lunes 6 de noviembre, la aldea Morelia y otras comunidades perdieron el puente colgante que las comunicaba. Aunque no colapsó completamente, quedó en vulnerable a desplomarse por la fuerza del río que corre debajo de él.

En el municipio de San Sebastián H, algunas carreteras quedaron afectadas, pero la población trabajó para arreglarlas, como lo hizo San Juan Ixcoy.

Las comunidades Txe’joj, Tui’ Sqisal I y Tui’ Sqisal II quedaron incomunicadas por un derrumbe provocado por las lluvias. Reporteros comunitarios indicaron que la población de estas comunidades está sufriendo por no poder tener acceso a servicios de salud, ni siquiera para casos de emergencia.

Aunque hay una vía alterna que podrían tomar por otro municipio que es San Juan Atitán, algunos vecinos han argumentado que dar esa vuelta subirá el costo del transporte.

El alcalde actual de San Sebastián, Rigoberto Sales, no ha respondido al clamor de ayuda y ha dicho que no la brindará porque no ganó la reelección.

Sales habría dado maquinaria que no sería útil para quitar el derrumbe. Así que los vecinos han aportado su mano de obra por más de una semana para lograr liberar el camino a vehículos livianos, aunque la vía se considera todavía peligrosa.

En tanto, en Santa Cruz Barillas los efectos de las lluvias fueron menores. Si bien hasta hace unos días, continuaban las lluvias, estas no eran intensas ni hubo reportes de inundaciones. Sí se reportó un derrumbe grande en la comunidad de Vuelta Grande, en la carretera que va hacia San Mateo Ixtatán, pero de la limpieza se encargaría la empresa Jireh SA, según dijeron los reporteros locales.

Reporteros comunitarios también mostraron imágenes de la inundación de varias viviendas al centro de la aldea Pojom, en San Mateo Ixtatán.

En San Pedro Necta colapsó la pared de una vivienda por la saturación del agua en el caserío La Pinada de la aldea Chimiche y hubo un agrietamiento en la carretera de la aldea Huixoc, pero no se reportaron heridos.

Pese a que las lluvias se han detenido o disminuido, reportes comunitarios han apuntado a que tras las lluvias, Huehuetenango y demás municipio del norte del departamento, continúan bajo riesgo por la saturación de suelos, que podría provocar derrumbes y deslizamientos de tierra.
Por ejemplo, el 15 de noviembre, la Conred reportó el derrumbe parcial de un cerro que ocasionó daños a una vivienda en el caserío Río Seco, Aguacatán, en la Sierra de los Cuchumatanes.

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