Entre los partidos que desde ese año estaban siendo investigados por supuesto financiamiento electoral irregular, estaba la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), Visión con Valores (VIVA), Compromiso Renovación y Orden (CREO), Unión del Cambio Nacional (UCN), URNG-MAIZ y Fuerza.
Por Prensa Comunitaria
La Fiscalía Especial contra la Impunidad (FECI) anunció la semana pasada una investigación por la supuesta comisión de delitos electorales contra el partido Semilla y pidió la suspensión de la participación política de esa agrupación. La FECI señala que el caso se inició por una denuncia de una firma falsificada en una hoja de adhesión del partido.
Esa investigación ha avanzado en menos de un año. Sin embargo, aquellas pesquisas por casos graves como financiamiento electoral irregular, contra al menos siete partidos, que estaban en manos de Rafael Curruchiche cuando era el jefe de la Fiscalía de Delitos Electorales, en 2015, no han prosperado y el ente investigador tampoco ha presentado resultados.
Entre los partidos que desde ese año estaban siendo investigados por supuesto financiamiento electoral irregular estaba la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), TODOS, FCN-Nación, Visión con Valores (VIVA), Compromiso Renovación y Orden (CREO), Unión del Cambio Nacional (UCN), URNG-MAIZ y Fuerza.
Cuando Curruchiche dirigía esa unidad, especializada en investigar casos, anunció que había pedido que Gestión Penal designara un juzgado para cada caso. Pero tiempo después, ninguno de esos expedientes tuvo resultados para esas pesquisas.
“El MP actúa en seguimiento a la petición que el Tribunal Supremo Electoral hizo para investigar a dichas agrupaciones, con el fin de determinar si incurrieron en delitos sobre la fiscalización electoral de fondos contemplada en el artículo 407 ‘L’ del Código Penal”, informó el MP cuando se anunciaron los casos.
Los hechos que se investigaban están relacionados a denuncias planteadas por el TSE por posible financiamiento electoral no registrado de 2015. La averiguación que hacía el MP era sobre aportes económicos y en especie, que no fueron reportadas a la autoridad.
En mayo de 2021, cuando Curruchiche aún era jefe de la Fiscalía de Delitos Electorales, justificó que no habían avanzado por la pandemia y que las instituciones a las que se les pedía información no estaban trabajando. “Todo ese tipo de situaciones ha permitido que estas investigaciones no avancen, algunas audiencias se aplazan y se reprograman de cinco o hasta seis meses después”, dijo la Fiscalía.
Ocho años y sin resultados
En junio del año pasado, la Fiscalía de Delitos Electorales solicitó nueva información al TSE relacionada a distintos partidos políticos que están siendo investigados por supuesto financiamiento irregular durante la campaña de 2015.
La información requerida consistía en informes de auditoría que el TSE había practicado a las agrupaciones políticas denunciadas, por distintas irregularidades detectadas en ese evento electoral.
Con una nueva encargada en esa fiscalía, se indicó que la falta de esa documentación impedía que el ente investigador pudiera determinar si existía o no la comisión de un delito.
“Solicita proporcione información sobre la campaña electoral del año 2015 (…) en relación a aportes dinerarios y no dinerarios, no canalizados a través de la respectiva organización política y demás datos que indica”, señala parte del requerimiento remitido al TSE.
En noviembre de 2021, se designó a una nueva encargada de dirigir la Fiscalía de Delitos Electorales, quien había retomado y reactivado el trabajo en esas investigaciones por denuncias que fueron presentadas por las autoridades electorales.
