Caso estudiantes UVG: recurso legal que busca justicia por muerte de tres universitarios sigue sin resolverse

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Créditos: A once años de la muerte de los estudiantes, sus familias siguen buscando justicia. Arte Jorge de León
Tiempo de lectura: 3 minutos

En el año 2021, los familiares de los universitarios fallecidos en 2012 en instalaciones de la Compañía Guatemalteca de Níquel CGN, accionaron ante la CSJ contra la Sala de Apelaciones de Izabal, que anuló la condena que se había dictado contra el biólogo Lemuel Valle, trabajador de la minera y de la Universidad del Valle de Guatemala.

Prensa Comunitaria

Desde el año 2021, las familias de tres estudiantes de la Universidad del Valle de Guatemala (UVG) que fallecieron en una gira de campo en 2012, presentaron una casación en contra de la resolución de la Sala de Apelaciones de Puertos Barrios, que anuló la sentencia del juez Jesús Felícito Mazariegos, que condenó al biólogo Lemuel Valle, trabajador de la Compañía Guatemalteca de Níquel (CGN). Once años después como único responsable del crimen.

Los familiares de los jóvenes universitarios siguen buscando justicia, luego de casi 11 años de la muerte de Juan Carlos Velásquez, Ángel de León y Naomy Lara, quienes fallecieron en un trabajo de campo de la UVG en la reserva natural Setal de la CGN, en El Estor.

La casación que se planteó por las víctimas debe ser resuelta por la Cámara Penal de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), sin embargo, el recurso legal aún no se ha resuelto. De ese fallo depende que se repita o no el debate contra Valle.

En una entrevista de ese mismo año, Carlos de León, padre de Ángel de León, afirmó que lo que a las familias le había costado siete años lograr, una condena por homicidio culposo en contra de Valle, una Sala Mixta de Apelaciones de Puerto Barrios lo dejó sin efecto, de manera burda. De acuerdo con De León, los magistrados invalidaron el valor probatorio de todo lo que el juez Mazariegos había aceptado durante el juicio.

Las tres familias han denunciado desde 2012 que la UVG y la compañía minera bloquearon que se tuviera acceso a la verdad, incluso entorpecieron en varias ocasiones el proceso de justicia a tal punto que ha pasado más de una década y este crimen continúa en la impunidad, incluso con un único responsable.

La transnacional ruso-suiza Solway ya tenía la propiedad de los proyectos mineros de CGN, durante el juicio el ruso y gerente general Dmitry Kudriakov fue citado a declarar por la responsabilidad de la empresa en este caso. Kudriakov salió de Guatemala en 2022 luego de ser señalado por los Departamentos del Tesoro y de Estado, de los Estados Unidos, como actores que promueven la corrupción y los sobornos en Guatemala.

La compañía minera también esta vinculada al caso por su responsabilidad, por la cual se le impuso una sanción de resarcimiento. Mientras que el Rector Roberto Moreno y la UVG logró librarse de la responsabilidad que, incluyo negándose desde el inicio a dar cualquier apoyo a las familias, lo que causó su indignación.

El caso

El 12 de junio de 2019, el juez Felícito Mazariegos había condenado a Lemuel Valle, quien laboraba para CGN como técnico en manejo de reserva y biodiversidad, a cinco años de prisión conmutables a razón de Q15 diarios, por el delito de homicidio culposo. Pena que luego fue revocada.

La fiscalía que investigó el hecho, informó que eran alrededor de las 6:30 de la noche, cuando Lemuel reunió a los tres estudiantes que lo acompañarían a observar y contar cocodrilos en un canal de la reserva privada de la compañía; una tarea que debería tardar no más de tres horas.

El trabajador y los estudiantes Ángel Rodolfo de León Palacios, Naomy Lara Orellana y Juan Carlos Velásquez Marroquín, tomaron un bote y realizaron el recorrido.

Al salir del canal hacia el lago, según sostiene Valle, un oleaje golpeaba la embarcación y fue tanta la fuerza que finalmente provocó que este volcara y todos cayeran al agua.

Varios peritajes durante el juicio demostraron que la versión de Valle era falsa y que, dos de los estudiantes habrían recibido un golpe contundente en la cabeza, el INACIF también afirmo que la causa de muerte de los tres fue asfixia por sumersión. En el caso de Ángel y Juan Carlos, ambos tenían un golpe en la frente, causado por un golpe con un objeto contundente, sin poderse determinar si este fue causado antes de la muerte.

Este 31 de marzo se cumplen 11 años del crimen, Carlos De León y su familia recordaron de esta fecha de esta manera:

 

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