La carta de los investigadores es muy clara, en cuanto a desacreditar una versión del INDH, que no corresponde a la versión final que ellos entregaron, que fue recibida, aprobada y enviada a impresión en junio de 2021.
Por Luis Ovalle
Ocho destacados académicos y académicas, que trabajaron en la elaboración del documento: “La celeridad del cambio: hacia una mirada territorial del desarrollo humano. Informe de Desarrollo Humano 2020. Panorama General”, hicieron llegar una carta a Ana María Díaz, representante residente del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), en la que piden que sus nombres no aparezcan en la nueva versión que están preparando.
En la misiva destacan que fueron convocados por el PNUD para ser parte del equipo que elaboró el informe, debido a su experiencia en la investigación social en Guatemala. “Aceptamos la invitación porque conocíamos la trayectoria, credibilidad y calidad de los informes INDH. Así como el respeto con que el PNUD ha tratado anteriormente los trabajos realizados por otros académicos, o por nosotros mismos en otras ocasiones”.
Enfatizan en la manera en que la institución ha defendido la integridad e independencia intelectual del trabajo del equipo del INDH, lo cual está en concordancia con lo estipulado en la Resolución de la Asamblea de Naciones Unidas, que rige este tipo de informes respecto a la autonomía editorial.
#Ahora Hace una semana se denunció la censura del Informe Nacional de Desarrollo Humano 2021, por parte de @DrGiammattei y @PNUDGuatemala. Esta vez equipo de investigación desconce el contenido del informe y se distancia de cualquier publicación del #INDH y esa institución. ??? pic.twitter.com/H32yRuc0W7
— PrensaComunitaria (@PrensaComunitar) March 3, 2022
El equipo de investigación, entre quienes se encuentra María Victoria García Vettorazzi, doctora en Ciencias Políticas y Sociales con especialidad en Estudios de Desarrollo por la Universidad Católica de Lovaina, así como Santiago Bastos Amigo, doctor en Ciencias Sociales por el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS) Occidente y la Universidad de Guadalajara, señala que el trabajo que hicieron y que llegó a su fase final, hasta ser impreso, cuenta con una presentación y firma de aprobación.
Sin embargo, un comunicado de prensa del PNUD, emitido el 16 de febrero de 2022 indica que el informe se encuentra en “proceso de verificación, edición y revisión técnica” y que para ello hay un nuevo equipo, al que los primeros investigadores no conocen, como tampoco conocen las modificaciones o cambios que incorporan al documento final, que entregaron al PNUD y fue enviado a imprenta en junio de 2021.
La carta, signada también por Matilde González-Izás, doctora en Ciencias Sociales con especialidad en Sociología, por el Colegio de México, e Iliana Monterroso, doctora en Ciencias Ambientales, con especialidad en Economía Ecológica y Gestión Ambiental, por Universitat Autònoma de Barcelona, tiene como principal objetivo que sus nombres no aparezcan como responsables de su contenido, estructura y redacción.
También integraron el equipo y firmaron la carta, Manuela Camus Bergareche, doctora en Ciencias Sociales por el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS) Occidente y la Universidad de Guadalajara; Claudia Dary, doctora en Antropología por la Universidad Estatal de Nueva York (SUNY), Mónica E. Salazar Vides, magister en Psicología Social y Violencias Políticas, por la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales-FLACSO Guatemala, y Leticia González Sandoval, doctora en Historia y Estudios Humanísticos por la Universidad Pablo de Olavide, de Sevilla.
Lo que no de dice
La carta de los investigadores es muy clara, en cuanto a desacreditar una versión del INDH, que no corresponde a la versión final que ellos entregaron, que fue recibida, aprobada y enviada a impresión en junio de 2021.
Sin embargo, no mencionan que el informe habría provocado el malestar del gobierno de Alejandro Giammattei, que le fue presentado precisamente en junio pasado, como lo hizo ver, en otra carta el equipo que integra el Consejo Consultivo.
La doctora y experta en investigación social, Karin Slowing, recordó que en 2005, durante el gobierno de Oscar Berger, se intentó censurar el “Informe Diversidad Étnico Cultural y Desarrollo Humano”, pero el PNUD supo defender su independencia editorial, respaldó a su equipo técnico y publicó el informe que resultó premiado a nivel mundial por su calidad científica.
Un Informe de Desarrollo Humano que provoca la ira de Giammattei
En declaraciones al medio digital No Ficción, Díaz, representante residente del PNUD, desmintió que el presidente Giammattei haya cuestionado el informe y señaló que no existía una versión final todavía. “Estábamos en ese proceso de editar, seguíamos revisando la parte investigativa que se había hecho, es la base con lo que hemos trabajado”, dijo.