Texto leído en la entrega del Reconocimiento entregado por la Asociación de Periodistas de Guatemala a Prensa Comunitaria con motivo del Día del Periodista, 30 de noviembre de 2021
Estimadas señoras y señores de la Junta Directiva de la Asociación de Periodistas de Guatemala
Estimadas y estimados colegas periodistas miembros de la Asociación
Colegas periodistas de Guatemala
En nombre del colectivo de mujeres y hombres que hacemos Prensa Comunitaria, quiero manifestar nuestro profundo agradecimiento a la APG por el reconocimiento que hace a nuestra labor como medio independiente de comunicación y como colectivo que lucha por libertad de expresión en nuestro país.
Ahora que estamos por cumplir nueve años de trabajo como Prensa Comunitaria, nos sentimos muy honrados por este reconocimiento, que pensamos corresponde a la labor de todas las personas y organizaciones que en Guatemala buscamos contribuir a la justicia y libertad en nuestro país desde la labor informativa independiente.
Estamos especialmente contentos, pues se reconoce a un medio en que en su mismo nombre aparece la labor de los y las periodistas comunitarios. Esto supone un tremendo avance en la lucha contra el racismo y el desprecio en un país que sistemáticamente se ha negado a considerar en su justo valor los conocimientos y las capacidades de la mayoría de sus habitantes. Al reconocernos como parte del colectivo de los periodistas en Guatemala, se está derrumbando un tremendo muro de silencio que ya ha durado demasiado tiempo.
Además, al mencionarnos en relación con la lucha por la libertad de expresión, la APG está dándonos pie para continuar practicando un periodismo que busca poner en su centro la necesidad de dar la voz a quienes están luchando por que este país sea un lugar digno de vivirse dos. La defensa de los derechos para todas y todos es la fuerza que ha guiado nuestro caminar.
Desafortunadamente, como todos sabemos, reclamar en nuestra Guatemala por derechos es algo que cada vez es más difícil y más peligroso. La cantidad de vidas que han sido truncadas, las intimidaciones y persecuciones a mujeres y hombres, jóvenes y maduros, indígenas y mestizos defensores y defensoras de derechos, no hace más que aumentar desde que en Guatemala supuestamente se firmó la paz.
Entre esos defensores, las y los comunicadores somos un grupo especialmente golpeado, como bien saben compañeros y compañeras de Prensa Comunitaria y otros medios cuya labor les ha llevado a ser víctimas de intimidación, persecución y violencia en diversas formas.
Pero esta tarde aquí, recibiendo este reconocimiento de manos los colegas periodistas del país, nos hace reafirmarnos en nuestra convicción de la importancia de la información veraz y consciente como un requisito esencial para ejercer los derechos que nos corresponden a todas y todos y así poder vivir con la dignidad que nos merecemos. Por ello, en el día del y la periodista, día queremos terminar en nombre de Prensa Comunitaria haciendo nuestra la consigna que esta mañana entonaron los colegas en la Plaza central:
¡Tenemos mucho que decir!
¡¡No nos callarán!!