(APC Bolivia. La Paz) Con un gran compromiso por delante y una agenda común por los procesos de Comunicación Indígena Comunitaria del Abya Yala, culminó con éxito el Encuentro Continental de Comunicación Indígena Comunitaria realizado desde el 30 de noviembre al 4 de diciembre en las ciudades de Cochabamba y La Paz (Bolivia).
En el evento participaron delegadas y delegados de Perú, Chile, Ecuador, Guatemala, México, Argentina y de diferentes departamentos de Bolivia. Esta actividad fue impulsada por las organizaciones nacionales del Pacto de Unidad, comunicadoras y comunicadores de la Coordinadora Audiovisual Indígena de Bolivia – CAIB y contó con el apoyo de CEFREC.
El evento continental culminó con la firma de una declaración que contiene los puntos más relevantes que se han discutido durante el desarrollo del mismo. Se trata de temas sumamente sensibles y necesarios para el quehacer de la comunicación indígena comunitaria en el continente, como la crimininalización y persecución de comunicadores, fortalecimiento de la articulación continental, cuidado y sanación interna, incidencia política a nivel nacional e internacional, así como producción comunicacional estratégica.
A continuación presentamos una versión reducida del documento y adjuntamos el documento oficial firmado por las y los representantes.
DECLARACIÓN DEL ENCUENTRO CONTINENTAL DE COMUNICACIÓN INDÍGENA COMUNITARIA
LA PAZ, ESTADO PLURINACIONAL DE BOLIVIA. 30 DE NOVIEMBRE – 4 DE DICIEMBRE DE 2021
La Comunicación Indígena Comunitaria es un murmullo que crece desde nuestras comunidades hasta convertirse en un viento que sopla a favor de nuestros pueblos, territorios y de los derechos que nos pertenecen.
PREÁMBULO
Estamos viviendo las últimas semanas del año 2021 y constatamos, una vez más, que esta etapa ha estado plena de claro-oscuros en nuestra Abya Yala. Hemos llorado y hemos reído con aciertos y errores cometidos, con avances y retrocesos sufridos; en suma, hemos sentido que seguimos siendo pueblos vivos pese a tanta violencia contra nuestros derechos como personas y como pueblos.
La Pandemia de la Covid-19 sigue marcando nuestra vida comunitaria, evidenciando el abandono de la mayoría de los gobiernos del continente hacia nuestros pueblos, abandono que podemos afirmar se convierte en una nueva criminalidad cuando no se da la atención debida frente a una pandemia como la que atraviesa la humanidad, con actitudes que manifiestan un racismo que nunca se fue. En este contexto, desde la comunicación hemos tenido que asumir un rol que, siendo de entera responsabilidad de los estados estos no asumían. Nuestro objetivo ha sido contribuir a la protección de nuestras comunidades. Así, hemos llevado la información posible sobre la pandemia y los medios colectivos e individuales a nuestro alcance para enfrentarla.
Tenemos que afirmar que en los últimos años la reacción del sistema capitalista, en su vertiente neoliberal, para mantener su dominio extiende el extractivismo por gran parte de Abya Yala. Agudiza así, entre otros, el patriarcado como sistema global de dominación en el que a las mujeres, a nuestras hermanas, se las sigue arrinconando en una posición de subalternidad en las sociedades. Por eso nos sumamos y acompañamos desde la Comunicación Indígena Comunitaria los procesos de empoderamiento personal y colectivo, de ejercicio de todos los derechos de todas nuestras hermanas.
Hay represión y persecución, se multiplican las criminalizaciones, encarcelamientos y asesinatos por el trabajo que hacemos, que no es sino la defensa y ejercicio de los derechos que nos pertenecen como pueblos. Este es el marco continental y en este la Comunicación Indígena Comunitaria ya no es un murmullo, sino que se transforma en huracán a favor de los procesos de nuestros pueblos.
Ante todo lo señalado, afirmamos:
1.- El uso estratégico de todos los medios de comunicación, desde los escritos hasta la radio, desde la televisión hasta las redes sociales, convierte a la Comunicación Indígena Comunitaria en herramienta innegable para los procesos de transformación hacia sociedades más justas para todos los pueblos, con énfasis especial en el ejercicio pleno e irrenunciable de los derechos humanos colectivos e individuales que nos corresponden.
2. Para la construcción de Estados Plurinacionales y una Abya Yala igualmente Plurinacional es imprescindible avanzar en los procesos de descolonización y despatriarcalización. Desde la Comunicación Indígena Comunitaria reafirmamos el compromiso por construir una comunicación inundada por la descolonización y la despatriarcalización.
3.- Conocedores de las realidades diversas en nuestros territorios, pero también de la existencia de actores comunes que saquean y explotan los mismos, denunciamos con firmeza las violaciones a nuestros derechos y a los de la Madre Tierra.
Respecto al papel de la Comunicación Indígena Comunitaria en el actual contexto social y político:
4.- Además de la denuncia continua contra las violaciones a nuestros derechos, necesitamos apoyarnos en nuestra comunalidad, en nuestra ancestralidad, protegernos y generar espacios de sanación, solidaridad mutua y encuentros territoriales.
5.- La Comunicación Indígena Comunitaria debe organizarse en base a nuestras organizaciones representativas y pueblos. Son ellas y ellos quienes nos marcan el camino, las urgencias, las necesidades y los modos para desde esta comunicación fortalecerlas.
6.- Demandamos el reconocimiento institucional de los Estados y gobiernos, respeto por nuestros comunicadores y comunicadoras, por nuestros medios, en suma, por nuestras voces y pensamientos que no transmiten sino aquello que en justicia corresponde a nuestros pueblos indígenas originarios. Necesitamos leyes y políticas públicas que nos permitan fortalecer el trabajo comunicacional y deben de tener recursos asignados para ser realmente implementadas.
7.- Es necesario crear y alimentar alianzas continentales que, como Runasur, nos fortalezcan, también en el ámbito comunicacional, nos formen y generen intercambios entre las experiencias propias. Debemos encontrarnos, mirarnos, abrazarnos, analizarnos y criticarnos para fortalecernos desde nuestras memorias y experiencias, más allá de intereses e instituciones que puedan dividirnos.
8.- Reconocemos expresamente al proceso comunicacional indígena originario campesino de Bolivia, a sus avances y enseñanzas en estos 25 años del Sistema Plurinacional de Comunicación Indígena Originario Campesino del Estado Plurinacional de Bolivia. Son ejemplo y referente para otros países que ya caminamos en esta construcción de una comunicación propia.
Respecto a la relación de la Comunicación Indígena Comunitaria y los marcos legales:
9.- Es necesario y urgente construir una agenda común continental que, teniendo presente las distintas realidades y coyunturas políticas, nos permita avanzar en el derecho pleno y efectivo de nuestros pueblos a construir una comunicación propia, sin obstáculos legales, técnicos y administrativos. Es importante avanzar en la aprobación y desarrollo de normativas estatales en los diferentes países de Abya Yala, en base a propuestas de las organizaciones representativas de nuestros pueblos.
10.- Urgimos a los Estados a la firma, ratificación y, especialmente, a la implementación de los Convenios y Tratados internacionales de derechos humanos colectivos e individuales referidos al Derecho a la Comunicación, como el Convenio 169 de la OIT y la Declaración de Naciones Unidas de Derechos de los Pueblos Indígenas.
11.- Es importante incluir la situación y el compromiso por el fortalecimiento de la Comunicación Indígena Comunitaria en las agendas de trabajo de los diferentes mecanismos de integración regional para poder desarrollar una agenda de discusión e implementación para el ejercicio pleno de los derechos comunicacionales de los pueblos indígenas originarios.
Respecto al papel de la Comunicación Indígena Comunitaria en la defensa de la Vida y los Territorios de nuestros pueblos:
12.- Debemos seguir trabajando, no solo en el ámbito comunicacional, por fortalecer una labor articulada y en red entre los y las comunicadoras indígenas de Abya Yala, en defensa de la Vida y el Territorio continuamente violentados por intereses de las diferentes élites políticas y económicas, tanto locales como transnacionales.
13.- Expresamos nuestra preocupación, y elevamos nuestra voz a gobiernos y otros actores en la demanda por garantizar el derecho a la comunicación y, especialmente, por la defensa y seguridad de las y los comunicadores indígenas comunitarios. Demandamos la intervención de los diferentes organismos e instancias internacionales defensoras de los derechos humanos para hacer frente a esta dura realidad que atraviesa a nuestros pueblos.
14.- Hacemos una mención especial a la persecución criminal que el sistema dominante mantiene en muchos países contra nuestra juventud y nuestras hermanas comunicadoras. Sabemos, y así lo denunciamos, que el sistema utiliza una doble criminalización, una doble persecución contra las comunicadoras indígenas todo ello resultado directo del sistema patriarcal y machista en el que se desarrollan nuestras vidas.
15.- Es importante fortalecer y analizar nuevas propuestas de formación en comunicación y en derechos, como es el caso de la Escuela de Comunicación Continental Itinerante. Las mismas se nutrirán con los procesos comunitarios de formación locales, fortaleciéndose mutuamente.
16.- Reiteramos la necesidad de celebrar la Cumbre de Comunicación Continental de Abya Yala que, en gran medida la pandemia de la Covid-19 ha imposibilitado. Ello, para el fortalecimiento de la Comunicación Indígena Comunitaria y con el fin de que las propuestas y tareas que surjan de ella podamos concretarlas.
17.- Por último, reafirmamos nuestro compromiso en la recuperación de las lenguas, memorias, sueños y formas propias de comunicación de nuestros pueblos y comunidades.
¡Jallalla la Comunicación Indígena Comunitaria!
¡Jallalla los comunicadores y las comunicadoras indígenas¡
¡Jallalla Abya Yala!
Declaración final del Encuentro Continental de Comunicación Indígena Comunitaria