Por Omar Pérez Pablo
Iram Gómez Pérez, es un emprendedor tejutleco que con orgullo cuenta que durante la pandemia de coronavirus pasó de vendedor a ensamblador de molinos, en su taller de reparación y ensamblaje ubicado en Los Frutales, Tejutla, San Marcos.
Cuenta que luego de 11 años de vender molinos de nixtamal, desde familiares e industriales, durante la pandemia y debido a las restricciones para salir a vender, aprovechó sus conocimientos de reparación de motores y molinos. Así nació la idea, hace cuatro meses, de comenzar a ensamblar.
Agrega que ha logrado posicionarse en el mercado por su propio sistema de ensamblaje y porque vende la maquinaria con su equipamiento completo para funcionamiento y mantenimiento. Gómez se siente motivado por el emprendimiento, porque toda su familia está involucrada y ya tiene una sala de ventas en la cabecera municipal de Tejutla, además de ofrecer asesorías y asistencia técnica.