Por Estuardo Tunche
Un grupo de artistas visuales reivindicó el arte, a través de acciones simbólicas de eliminación de logos en algunas paredes de las zonas 1,3, 7 y 10 de la ciudad de Quetzaltenango y sensibilizar así a la población, sobre la realidad del país. La actividad se llevó a cabo el pasado sábado 24 de abril.
La apatía ha sido promovida por los gobernantes de turno, dijeron los organizadores. “No nos importa la política, la sociedad, solo pensamos en ir a casa, comer y estar tranquilos en nuestro pedacito, por eso buscamos reivindicar al artista visual y al arte, el arte tiene un papel muy importante y es abrirle los ojos a la población y son cosas que no hemos hecho”, mencionó José Molina Salazar, integrante del colectivo.
Para el artista quetzalteco, hay necesidad de despertar a la gente, hay cánones culturales y estéticos que vienen desde años atrás y que siguen imperando en nuestra sociedad, por lo que es necesario romper con las normas jurídicas, estéticas y sociales. “Rompiendo las normas culturales vigentes, estándares académicos y cánones de estética tomaremos los espacios públicos desarrollando intervenciones artísticas sin límites de acción, enfocadas a educar en general la sensibilidad de toda la población”, agregó Salazar.
A través de coincidir en galerías de arte y de pláticas, desde hace un año un nutrido grupo de hombres y mujeres que se enfocan en el arte visual decidieron crear un colectivo improvisado, que busca promover conciencia en la sociedad, ya que en su opinión, en Quetzaltenango hay una apatía generalizada, incluyendo a los artistas, sobre la realidad local y nacional.
Asimismo, el colectivo persigue con estas acciones mostrar el papel del arte en el país, el reconocimiento del trabajo que realizan. “Tenemos un ministerio de cultura y deportes que no ha hecho nada por el arte y no lo ha tomado enserio, pagando 1 millón 300 mil quetzales a un artista desconocido que no tiene conciencia por lo que estamos pasando, se utiliza la cultura y el arte como un motivo para seguir desfalcando las arcas del Estado”, agregó, José Molina Salazar.
En la experiencia de Molina, el arte debe de explotar la conciencia de las personas, tiene que hacer que se transcienda por medio de otro lenguaje que sea atractivo para el público. Ese es el papel del artista, agregó. “El arte es una práctica y no un producto”, subrayó.
Las próximas intervenciones en el espacio público dependerán de la coyuntura, con esa intención fue que el fin de semana se plantearon borrar del espacio público el nombre y logos de instituciones de gobierno.
