Por David Toro
Alejandro Giammattei fue juramentado como nuevo presidente de Guatemala, tras cuatro intentos por ganar las elecciones. Empoderar las fuerzas de seguridad, persecución y castigo contra pandillas, certeza jurídica para garantizar proyectos de “desarrollo”, acompañados de una evidente emoción que manifestaba alzando sus puños, gritando y perdiendo el aliento por momentos.
“A las pandillas hay que tratarlos como lo que son… terroristas” La primera iniciativa de ley que Giammattei lanzó como nuevo presidente es declarar a los pandilleros como terroristas. En el teatro nacional los invitados y asistentes a la toma de posesión, en su mayoría integrantes del gobierno saliente y el entrante, reaccionaron con una fuerte ovación, mientras un exaltado Giammattei gritaba y amenazaba.
“acepto que hemos marginado a los pueblos indígenas” Giammattei aseguró que tiene planes de “desarrollo” para el país y que es necesario que los pueblos indígenas sean tomados en cuenta. Posterior a la firma de los acuerdos de paz en 1996, a través del neoliberalismo, las grandes industrias han impuesto megaproyectos en territorios indígenas a costas de los derechos de las comunidades, el nuevo gobierno se caracteriza por su cercanía a dichos grupos empresariales.
“Hasta el día de hoy la Policía tiene miedo de usar sus armas… agentes de seguridad, cuiden de nosotros y nosotros cuidaremos de ustedes”.
Alejandro Giammattei asegura que dará mayor poder a las fuerzas de seguridad del Estado y envío este mensaje directo a los elementos de la Policía Nacional Civil. Giammattei estuvo ligado a proceso por ejecuciones extrajudiciales previo a su llegada a la presidencia.
“Es importante garantizar la certeza jurídica para llevar a cabo proyectos de desarrollo”. El ahora nuevo presidente, luego de afirmar la buena relación con grupos empresariales, recordó su compromiso para que se lleven adelante megaproyectos industriales.
“ Pediré que la Secretaría de Asuntos Administrativos y de Seguridad (SAAS) sea eliminada, se a convertido en un nido de corrupción”. Como en sus promesas de campaña, Giammattei aseguró que eliminará a la SAAS, sin embargo durante la transición de gobierno, 12 agentes de dicha secretaría fueron asignados para cuidarlo.