La REDSAG intentó presentar memoriales ante la presidencia del Congreso de la República para manifestar sus inquietudes por la Ley Monsanto, pero no fueron recibidos por las autoridades legislativas.
Por Rony Ríos
La Red Nacional por la Defensa de la Soberanía Alimentaria en Guatemala (REDSAG) se presentó al Congreso de la República para manifestar su rechazo ante la iniciativa 6283 denominada Ley de Protección de Obtenciones Vegetales, pero que es un calco de la Ley Monsanto que se aprobó en 2014 y posteriormente fue derogada.
“Hace nueve años, los pueblos de Guatemala dijimos no a esa ley. La rechazamos porque sabemos que pone en peligro la herencia milenaria que nos dejaron los abuelos, nuestras semillas criollas y nativas, nuestro maíz de varios colores y formas, de varios sabores y fuerza; pero también tantos otros alimentos que cultivamos como los frijoles, el amaranto, las hierbas, los ayotes, las frutas”, dijeron los representantes de REDSAG en el Palacio Legislativo.
Además, señalaron que la iniciativa de ley está pensada para proteger y beneficiar a las grandes empresas dedicadas a la creación de semillas en laboratorios.
“Esa iniciativa de ley está pensada para proteger a estas grandes empresas, proteger su ganancia, privatizar las semillas, pero sabemos que los transgénicos son potencialmente dañinos para la salud humana y generan contaminación genética sobre nuestras propias semillas”, enfatizaron los miembros de la organización.
En la conferencia de prensa realizada en las instalaciones del Congreso, REDSAG rechazó el intento de aprobar la iniciativa de ley, exigieron al Congreso de la República no votar a favor de la misma y al presidente Alejandro Giammattei que ordene al Ministerio de Agricultura que retiren la propuesta de ley.
Otro de los aspectos que denunciaron fue que ya existe un reglamento para una ley que todavía no ha avanzado en el Congreso, lo cual a su consideración responde a un interés particular del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación.
Alegan discriminación
Los integrantes de REDSAG también informaron que, pese a ser un edificio público, la seguridad del Congreso de la República les impidió el ingreso a las instalaciones.
Según los representantes de la organización, tuvieron que acudir a varios diputados de oposición y no fue hasta que los asesores de los congresistas intercedieron que les permitieron el ingreso.
Ante esta situación una de las líderesas de la organización denunció que no entendían por qué se daba esa discriminación y por qué la presidenta del Organismo Legislativo, Shirley Rivera, no les concedía audiencia, pero sí recibió a una delegación de Agexport para conversar sobre el mismo tema.
Finalmente pudieron entregar un documento en la oficina de Guillermo Fuentes, presidente de la Comisión de Agricultura y Pesca del Congreso de la República para solicitar audiencia porque consideraron que no es justo que reciban a los empresarios.
Ley Monsanto
La iniciativa 6283 fue presentada por 15 diputados que integran la Comisión de Ganadería, Alimentación y Pesca. Cuatro diputados del bloque legislativo Vamos, cuatro de la UNE, tres de Valor, uno de Creo, uno de Todos, uno del Partido Humanista y un independiente.
Y en la misma se contemplan penas para los agricultores que siembren semillas modificadas sin contar con una licencia que emitirá el Estado.
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Esta iniciativa es un calco de la que fue aprobada en 2014, durante un mundial de fútbol, actividad deportiva que habría sido utilizada como distracción para que la aprobación de la ley avanzara en el Congreso de la República.
En esa ocasión, tras las manifestaciones de organizaciones de agricultores, campesinos y ambientalistas en rechazo de la misma, finalmente fue derogada durante la administración de Otto Pérez Molina, actualmente en prisión por actos de corrupción.
Las organizaciones señalan los mismos artículos que son cuestionados ahora, como la criminalización de las personas cuando violan el derecho de obtentor, que es otorgado por medio de patentes a los que inscriban como propias las semillas ante el Estado.
