Créditos: Emmanuel Andrés
Tiempo de lectura: 3 minutos

 

El actual proceso electoral se da en el marco de una profunda transformación de los medios de comunicación y un predominio de las redes sociales, además de una criminalización hacia los periodistas que ha provocado el encarcelamiento o exilio de algunos de ellos.

Prensa Comunitaria

Los medios tradicionales independientes, fundamentalmente los medios impresos, algunos canales de televisión abierta y radio se enfrentan a una triple crisis. En primer lugar, la circulación de los periódicos impresos se ha reducido.

Tal situación ha provocado que medios como La Hora y elPeriódico pasaran a un formato digital. Este último diario desapareció el mes pasado, luego de que fuera detenido Jose Rubén Zamora (su fundador) y sus anunciantes fueran hostigados.

El boicot en contra de los anunciantes, por razones políticas, es el otro elemento al que se enfrentan los medios tradicionales, lo cual provoca un menor flujo de dinero para sostener una empresa periodística.

elPeriódico también es una muestra del tercer elemento al que se enfrentan los medios: la criminalización. Tras la captura de Zamora, varios reporteros han tenido que exiliarse y otros han optado por bajar perfil y no abordar temas delicados. “Éramos el medio más humilde pero aguerrido”, aseguró Zamora, previo a que fuera condenado a seis años de prisión.

Eso se suma a las múltiples agresiones y detenciones a la que están sujetos los reporteros comunitarios. Prensa Comunitaria logró documentar que, solo el año pasado, hubo 161 agresiones en contra de periodistas, siendo las intimidaciones, el acoso judicial y las restricciones de acceso a las fuentes de información las acciones que encabezan la vulneración a la labor de los comunicadores.

En concordancia con lo anterior, el periodista Juan Luis Font, director de Con Criterio, manifestó que aparte de la criminalización hay un esfuerzo de “ahogo económico” para la prensa independiente en el país.

“Ese esfuerzo de ahogo se ve en que los medios que dependen de pauta publicitaria dejan de tenerla de las grandes empresas de Guatemala y dejan de tenerla porque hay un esfuerzo coordinado y deliberado para silenciar a los medios que generan crítica”, añadió.

Aliados

Por aparte, existen medios aliados al sistema, como es el caso de la televisión abierta y sus radios conexas, que han jugado un papel preponderante en la ofensiva contra la CICIG y han contribuido a legitimar y justificar las ilegalidades y arbitrariedades cometidas desde 2018.

La cobertura electoral del monopolio televisivo y sus radiofrecuencias, incluso meses antes de la convocatoria a elecciones, contribuyeron a posicionar a las y los candidatos preferidos por las redes políticas y económicas ilícitas, por medio de sus noticieros e infomerciales.

No obstante, en este contexto represivo para los medios críticos, han surgido algunas plataformas alternativas, particularmente digitales, que están presentando una amplia gama de enfoques y de periodismo en profundidad. Sin embargo, su desafío sigue siendo el alcance y acceso a un público más amplio.

Finalmente, las redes sociales se han convertido en los grandes protagonistas del proceso electoral. Mientras que las discusiones políticas surgen en Twitter, que es una red minoritaria en Guatemala, el intento de llegar a públicos más amplios y de manera más cercana se ha estado dando en TikTok.

Percepción internacional

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos, en su informe divulgado este año, detalló que la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión ha recibido denuncias sobre la “creciente criminalización de periodistas que investigan asuntos de interés público”.

“Estos hechos se insertan en un contexto de criminalización, denuncias penales y persecución judicial en contra de distintos grupos de personas que cumplen un rol relevante de escrutinio del poder público en Guatemala”, añadió el ente internacional.

De hecho, la Relatoría les ha dado seguimiento a los casos de los periodistas Juan Bautista Xol, Baudilio Choc y Carlos Choc, quienes han denunciado tener procesos judiciales en su contra y sufrir operativos en sus residencias, después de que les dieran cobertura a las manifestaciones de la población maya q’eqchí’ en contra de la mina Fénix en El Estor, Izabal.

Asimismo, Reporteros sin Fronteras (RSF) indicó que la libertad de expresión está garantizada en la Constitución de Guatemala, pero este derecho es “constantemente vulnerado por autoridades y actores políticos”.

“Los periodistas y medios que investigan o critican actos de corrupción y violaciones a derechos humanos suelen padecer represalias, como campañas de acoso y persecución penal”, añadió el colectivo de periodistas internacional.

RSF expuso, al evaluar la libertad de prensa en 180 países, que Guatemala, El Salvador, Honduras y Nicaragua obtuvieron calificaciones bajas en ese rubro y las ubicó entre los puestos 115 y 169 de esa clasificación.

El ranking describió que la libertad de prensa se encuentra en una situación “difícil” en El Salvador y Guatemala, en tanto que en Nicaragua y Honduras el contexto fue calificado como “muy grave”.

COMPARTE