Créditos: Leopoldo Batz.
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Durante 100 años consecutivos en la aldea Chivarreto, las autoridades comunitarias organizan la pelea a puño limpio cada viernes santo sobre un cuadrilátero de box gigante. Este encuentro reúne a miles de vecinos y visitantes de otros departamentos, incluso extranjeros.

Por Leopoldo Batz

Chivarreto es una de las aldeas que forman parte del municipio de San Francisco el Alto, se ubica a unos 204 kilómetros de la ciudad de Guatemala en el occidente del país en el departamento de Totonicapán. Lugar en donde se realizan año con año las peleas a puño limpio.

La localidad fue abarrotada este año por visitantes y vecinos de comunidades cercanas. Sus calles fueron insuficientes para la cantidad de personas que llegaron en vehículos, procedentes de varios lugares, unos para observar e incluso participar en las peleas a puño limpio.

Las viviendas que se ubican alrededor de donde se encuentra el cuadrilátero, son utilizadas como palcos y estos son abarrotados por los espectadores.

Las peleas son organizadas y dirigidas por la autoridad comunitaria de Chivarreto, quienes son responsables del montaje completo del evento. El Himno Nacional de Guatemala abrió la jornada, luego de la intervención de los dirigentes locales: Malaquías Hernández que, por 20 años ha estado como réferi principal.

Hernández da a conocer las reglas de las peleas:  solo se permiten puñetazos, no patadas ni golpes bajos y tampoco golpear al contrincante si cae el suelo.

Tras tres años de la pandemia dieron continuidad con esta tradición, que tiene más de 100 años de realizarse y como chivarretense que somos, no vamos a dejar de realizar este evento, indicó el alcalde comunal de esta localidad.

Aldea Chivarreto, San Francisco El Alto. Foto Leopoldo Batz.

¿Cómo iniciaron las peleas?  

“Cuentan los abuelos que estas peleas fueron también una práctica entre jóvenes que, en aquellos años, retornaban del ejército para medir fuerzas, su condición física y preparación, se retaban entre ellos”, nos comenta Pascual Abelardo Hernández, segundo secretario de la autoridad comunitaria.

Pero también surgen las peleas por la rivalidad que, aún se mantiene entre los grupos de jóvenes de dos comunidades, provenientes de San Antonio Pasajoc Momostenango y Chivarreto.

Anteriormente las peleas se realizaban en el campo arenoso de futbol de la localidad y para que los espectadores pudieran tener una mejor visibilidad en el 2012, se implementó un cuadrilátero, construido con el apoyo económico de los migrantes radicados en los Estados Unidos, comentó Hernández.

Alcaldes comunales de Chivarreto. Foto Leopoldo Batz.

¿Por qué se realizan los viernes santos y cuál es el significado religioso?

Según cuentan los ancestros, se escogió esta fecha para conmemorar la muerte de Jesús, la sangre significa los latigazos y el dolor que, sufrió al momento se ser crucificado indica Julio Gómez, un vecino del lugar.

Desde el inicio sirvió para limar asperezas y desacuerdos entre vecinos y comunidades y por eso el responsable de dirigir las peleas, ha sido la autoridad comunitaria para mayor control del evento y por el respeto que la población tienen en sus comunidades indígenas.

Peleas de box en Chivarreto. Foto Leopoldo Batz.

Las mujeres también se suben al Ring

Este 2023 fueron casi 30 las peleas que se realizaron, pero el atractivo de este año fueron dos peleas de mujeres. Sin protector bucal, ni guantes, las oponentes dieron un espectáculo que, fue del agrado de los asistentes que al final aplaudieron la valiente decisión de medirse a puñetazos.

Este año Chivarreto recibió a varios extranjeros, Jerry experto en artes marciales, originario de California, protagonizo varias peleas, pero la que llamo la atención fue contra una mujer de nombre doña Manuela que, le propinó varios golpes en el rostro.

El norteamericano señaló a Prensa Comunitaria que, le gusta participar y se dedica más a defenderse, porque no quiere lastimar a alguien, más bien participa en las peleas por diversión y un sano deporte.

Según los organizadores este año el evento rebaso el número de asistentes que esperaban provenientes de otros departamentos.

Al finalizar del evento, se organizó un concierto en vivo y al anochecer, un baile social en al parque de la localidad, al mismo tiempo las personas visitantes tuvieron acceso a la gastronomía local, con antojitos y comida tradicional.

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