Créditos: David Diego Marcos / prensa comunitaria.
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Miguel Sebastián Pedro Mateo, de habla maya Q’anjob’al es originario del municipio de Santa Eulalia, Huehuetenango, es una de las víctimas de la tragedia del incendio en un centro de detención migratorio en Ciudad Juárez, Chihuahua, México.

Por Lencho Pez

Sebastián Pedro, de 23 años, es hijo de Miguel Sebastián Esteban Pedro y de Teresa Mateo Miguel, una familia de escasos recursos económicos, originarios de la comunidad “Buena Vista” de Santa Eulalia, Huehuetenango. Es el menor de cuatro hermanos, y dejó a una niña de un año con diez meses, y a su esposa María Diana.

Soñó con ser emprendedor, empezó como lustrador de zapatos y con sus ahorros compró un carro Qute, con el cual se dedicó a hacer viajes y ganarse la vida.

Una tarde le dijo a su familia que quería viajar a los Estados Unidos, sin embargo, no contaba con el apoyo de alguien que respondiera por él. Pasaron los meses, pero nunca dejó de soñar.

Semanas antes de emprender el viaje decidió vender su carro. Con el dinero que consiguió dejó pagados algunos gastos de la familia y el saldo lo utilizó para ajustar para su “coyoteada” (el pago para el coyote).

Foto: Cortesía.

También solicitó préstamos a dos empresas financieras, para lo cual su familia hipotecó la escritura de la casa.

Él era miembro de una de las asociaciones de mototaxistas autorizadas por la municipalidad de este municipio, tenía su ruta de viajes y dejó vendido su vehículo con todo y la ruta.

El 10 de marzo de 2023, Miguel Pedro salió de su casa muy temprano, se despidió de su esposa, de su hija y de su madre.

Desde las primeras horas de su salida de la casa siempre mantuvo la comunicación con ellos, hasta cuando pasó la frontera de Guatemala hacia México. Dos días después de su ingreso en el territorio mexicano volvió a comunicarse, siempre se reportaba cuando llegaba a cada pueblo o ciudad.

El lunes 27 de marzo, en horas de la mañana, cuando arribaron a Ciudad Juárez, envió un mensaje de voz en el que indicaba que él y otras personas del grupo al que pertenecía habían llegado al lugar, sin embargo, la persona que supuestamente estaría esperándolos no la encontraban.

El grupo decidió entrar a la terminal de autobuses para resguardarse de las autoridades migratorias o de cualquier peligro. Ahí se tomaron fotos, en una aparecen diez personas incluido él y en otra solo estaban seis personas, que supuestamente las había conocido en el camino.

Foto: Cortesía.

En horas de la tarde del mismo día, volvió a enviar otro mensaje de voz en el que aseguró que habían sido detenidos por personal de migración y que ya se les había informado que serían enviados a Guatemala.

Esa fue la última comunicación que tuvo con la familia.

La familia de Sebastián Pedro señala que el martes 28 de marzo, se enteraron por medio de las redes sociales sobre un incendio en un centro de detención migratorio de Ciudad Juárez, Chihuahua.

“Para nuestra desgracia, apareció el nombre de mi primo en la nómina publicada por el gobierno mexicano”, dijo Alvina Pedro Esteban, quien se ha hecho cargo de todas las gestiones de repatriación del cuerpo de Miguel Sebastián Pedro Mateo.

El pasado domingo 2 de abril, fueron convocados los familiares de las víctimas por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Guatemala en la ciudad de Huehuetenango a una videoconferencia organizada por las autoridades mexicanas, en donde se constató la presencia de los representantes de RENAP, CONAMIGUA y otras entidades, esto con el objetivo de identificar a las víctimas a través de algunos rasgos personales. En esta reunión estuvo presente la madre del fallecido, su esposa, su hija y otros familiares.

El lunes 10 de abril fueron informados por voceros de la cancillería mexicana que el cuerpo de Miguel Sebastián sería repatriado a su país este martes 11 en horas de la tarde y será entregado a sus familiares el miércoles 12.

El Comité de Caridad, una organización propia de la comunidad de Buena Vista ha anunciado que saldrá una caravana desde Santa Eulalia hacia el lugar conocido como “Llano de San Miguel”, con destino a Huehuetenango para ir al encuentro del cuerpo, por lo que han invitado a quienes tienen la buena voluntad de acompañarlos y sumarse a la caravana.

El pueblo de Santa Eulalia está consternado ante esta tragedia y otras que han cobrado la vida de varios de sus habitantes que han intentado huir de la pobreza que se vive en el país.  Muchos han logrado sus objetivos y con el fruto de sus sacrificios han hecho de Huehuetenango, uno de los departamentos que ha generado un gran aporte a la economía a través de las remesas.

Foto: Verónica Martínez

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