…Agotada, también motivada, creemos que todavía podemos seguir haciendo algo y por eso resistimos, también creo que muchos nos sentimos todavía con fuerzas para poder seguir estando acá y para poder estar dando la lucha política”…representante de la Coordinadora General de Estudiantes
Por Juan Rosales
Nueve meses han pasado desde la primera toma de uno de los edificios de la USAC y es necesario escuchar las voces de las personas organizadas alrededor de la Coordinadora General de Estudiantes, cómo han vivido ese tiempo de organización, la lucha y resistencia ante la imposición de Walter Mazariegos como un rector ilegitimo que llegó al cargo de la universidad de San Carlos de manera fraudulenta.
Desde el 27 de abril de 2022 los estudiantes tomaron las instalaciones del Museo de la Universidad San Carlos de Guatemala, MUSAC, para evitar una elección a rector, amañada, desde el Consejo Superior Universitario.
El Musac fue la primera de las instalaciones de la Universidad de San Carlos en ser ocupada en forma de protesta por parte de estudiantes organizados y profesionales que se oponían al fraude.
Desde este espacio se han organizado foros, mítines y piquetes políticos para denunciar la imposición de Walter Mazariegos como rector de la USAC.
Luego del Musac, las tomas de edificios se esparcieron por el país. El edificio del Centro Universitario de Occidente (Cunoc) y el Centro Universitario de San Marcos (Cusam), han sido los centros universitarios regionales que hasta la fecha han sostenido las tomas y se han convertido en espinas en el costado del Consejo Superior Universitario, prueba de ello son los múltiples ataques físicos y amenazas de procesos legales contra de los miembros de la resistencia, de los que han sido objeto ambos centros.
Cada centro universitario tiene sus propias características y formas de resistencia que han aportado a la lucha desde su nicho. Ambas tomas tienen características similares, el compromiso del movimiento estudiantil, las necesidades que afrontan, las denuncias de corrupción de parte de las autoridades y la petición de tener una voz presente en el gobierno de la universidad de San Carlos.
Desde el Cusam se ha buscado el diálogo, sin dar frutos pues la postura de la dirección del centro se ha mostrado antagónica y cerrada.
El movimiento estudiantil del Cunoc ha sido uno de los más afectados por ataques y amenazas. Los estudiantes han tenido que enfrentar bombas molotov, amenazas a la integridad física y atentados de desalojo por parte de grupos de choque.
La lucha de ambos grupos estudiantiles es contra la imposición de Walter Mazariegos y por una mejora en la calidad de educación que reciben.
El Centro Cultural (antiguo Paraninfo Universitario), lugar donde miembros de la Escuela Superior de Arte mantienen la toma desde julio del año pasado buscan una mejora en la forma que reciben clases.
Las tomas en el Paraninfo se volvieron una constante, desde tiempo antes, pues han tenido que luchar por un espacio para poder recibir sus clases de una manera digna, la falta de presupuesto también es una demanda que piden sea atendida.
En el campus central de la USAC se escuchan diversas voces, la demanda por una mejor educación y por una nueva elección a rector no cambia, a pesar del cansancio y agotamiento la organización sigue en pie y la expectativa por una nueva etapa organizativa con el retorno a clases, les permite ver este nuevo año con optimismo para alcanzar una mayor organización con el estudiantado presente en las aulas y poder sacar a Walter Mazariegos de la silla de rector.
Los constantes ataques a la organización estudiantil y la falta de voluntad política del Consejo Superior Universitario para el diálogo han hecho que el movimiento estudiantil se repliegue, aun así, siguen en su lucha contra la imposición de un rector ilegítimo y por condiciones dignas para una mejor educación superior.