Juan Rosales
La Comisión de Derechos Humanos del Congreso de la República, presidida -y en su mayoría formada- por diputados oficialistas, eligió recientemente a José Alejandro Córdova Herrera, como nuevo Procurador de los Derechos Humanos (PDH). Este abogado ha sido señalado de tener el favoritismo del Presidente Alejandro Giammattei, pero además, de tener implicaciones en casos de cooptación de las cortes.
Con el argumento de dar continuidad a este proceso, la comisión citó a Jordán Rodas, para iniciar el proceso de entrega de su gestión, que además sirve de excusa al oficialismo para continuar con los ataques y señalamientos en contra de él como Defensor del Pueblo.
Julio López, secretario de la comisión y diputado por el partido UCN, tuvo acceso a los documentos que se habían enviado desde la Procuraduría de Derechos Humanos, pero no fueron compartidos con los demás miembros de la comisión. Los legisladores pidieron acceso a esos informes y a otros. La citación fue suspendida.
Por su parte, Jordán Rodas aprovechó esta oportunidad para presentar una propuesta de transición a José A. Córdova, pues aún no había podido comunicarse directamente con el procurador electo. A cambio, Córdova solicitó el acompañamiento de la Comisión de Derecho Humanos del Congreso de la República para la transición. Jordán Rodas ya ha dicho en otras ocasiones que esto no es un atributo de la Comisión y que esta se extralimita, al querer ser partícipe de la transición en una entidad autónoma como la Procuraduría de Derechos Humanos.