Imox, el altar sagrado de Barillas, un símbolo de la resistencia contra Hidro Santa Cruz

COMPARTE

Créditos: Sebastián Pascual y Palas Luin.
Tiempo de lectura: 3 minutos

Por Palas Luin

Integrantes del Movimiento de la Sociedad Civil realizan limpieza al altar llamado Imox,  situado en el centro del lugar de la resistencia Poza Verde, que fue instalado en 2013, ante la imposición de la hidroeléctrica Hidro Santa Cruz S.A., de la empresa española Ecoener Hidralia Energía, en el municipio de Santa Cruz Barillas.

Según los miembros de esta organización, el lugar es sagrado, por lo tanto, merece el mantenimiento constante, para que las personas que llegan a ofrendar o descansar, puedan contar con un espacio limpio y tranquilo bajo las sombras de los árboles que han sembrado.

La propiedad de la resistencia fue adquirida con el aporte económico de las personas de distintas aldeas del municipio, que participan activamente en el movimiento.

En 2012 fue asesinado en ese lugar el dirigente comunitario Andrés Pedro Miguel, de la aldea Recreo A, cuando iba a trabajar a su cultivo de milpa. Los señores Pablo Antonio y Esteban Bernabé también sufrieron intento de asesinato en el mismo lugar, por parte de los guardias de seguridad privada de la empresa, propiedad del español Luis Castro Valdivia.

A pesar del asesinato, en mayo de ese año, el empresario español intentó construir la hidroeléctrica sobre el río Q´anb´alam, sin consultar previamente a las comunidades de origen maya Q´anjob´al, que habitan en Santa Cruz Barillas.

Altar y resistencia reconocido

Actualmente, el altar Imox de la resistencia Poza Verde, es reconocido a nivel nacional e internacional por visibilizar las violaciones a los derechos humanos que generó la empresa a su llegada. La organización recuerda que por oponerse a la construcción de la Hidro Santa Cruz, los pobladores, tanto las mujeres, ancianos y menores de edad fueron reprimidos por el expresidente, Otto Pérez Molina, en mayo de 2012, cuando estableció un estado de sitio en el municipio.

Sin embargo, la empresa anunció su retiro del país en 2016, argumentando que ha “renunciado a los derechos otorgados por el Estado de Guatemala”. “Pese a que este tipo de proyectos de pequeñas hidroeléctricas son requeridos por el país, pues son respetuosos con el ambiente, se ha comprobado que, por razones diversas, no contó con la aceptación de una parte significativa de los habitantes del territorio en el que pretendían instalarse”, aseguraba en un comunicado de prensa.

Foto: Sebastián Pascual y Palas Luin.

En ese entonces, el abogado Rafael Maldonado indicaba que si la empresa había hecho algún tipo de construcción de infraestructura, tanto el Ministerio de Energía y Minas (MEM) como el de Medio Ambiente (MARN) debieron revisar hasta dónde lograron avanzar, para medir el impacto ambiental. Pero hasta la fecha las autoridades del gobierno no han hecho alguna investigación de verificación en la zona.

Lea más acá:

Barillas: después de un sinfín de violaciones a derechos humanos Hidro Santa Cruz anuncia posible retiro del país

Tras el retiro de la empresa, la dirigencia del Movimiento de la Sociedad Civil calificó como logro histórico la lucha que iniciaron contra la empresa, pero no olvidan que durante los casi 10 años de resistencia ocurrieron asesinatos, encarcelamientos, detenciones ilegales, persecución penal y la incursión de elementos de la Policía Nacional Civil (PNC) y del ejército, en contra de la población que exigía del Estado y las empresas, atención a sus demandas.

Lea más acá:

Santa Cruz Barillas y la historia de la Resistencia Pacífica Poza Verde

En 2007 el municipio de Barillas realizó su consulta comunitaria de Buena Fe, en la que casi el 100% de la población dijo NO a la explotación de sus recursos naturales, con base en lo que establece el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Foto: Sebastián Pascual y Palas Luin.

COMPARTE