Por David Diego Marcos
El territorio maya Q’anjob’al de Jolom Konob’, Santa Eulalia, Huehuetenango, alberga entre 30 y 35 participantes, provenientes de Huehuetenango, Quetzaltenango, Palín, Escuintla, Las Verapaces, San Raymundo y otros lugares del país, quienes buscan desarrollarse en el taller de epigrafía maya, nivel avanzado, denominado: “Entre cerros y valles, lugares sagrados del mundo Maya”.
El arqueólogo Alejandro Garay Herrera, informó que este taller de epigrafía maya se ha realizado durante 30 años, solo interrumpido el año pasado por la pandemia de la COVID 19. El objetivo es dar a conocer a los participantes sobre la cultura maya prehispánica, para que los mayas de hoy conozcan más sobre los mayas del pasado, ya que hay mucha similitud entre la cultura antigua y la que sobrevive en la actualidad.
En la cultura contemporánea se puede mencionar por ejemplo la preservación de las montañas, que son lugares sagrados hoy, pero lo mismo ocurría hace 500 años. en este taller en particular se habla de los diversos espacios, como las montañas, los cerros, las aguas y las cavernas, señaló el experto.
Asimismo, indicó que el taller es impartido por el doctor Nikolai Grube, de la Universidad de Bonn, Alemania, quien ha sido el encargado de estas formaciones desde hace 30 años.
Como parte de la actividad de aprendizaje se contemplan visitas a sitios arqueológicos del municipio y del territorio maya Chuj, de San Mateo Ixtatán y la Laguna Brava de Nentón, Huehuetenango.
Es importante que conozcamos nuestras raíces y nuestra cultura para saber hacia dónde dirigirnos. Si queremos construir un mejor futuro debemos conocer de nuestros antepasados. La cultura maya Q’anjob’al es una de las que más conserva prácticas y conocimientos del pasado, concluyó Alejandro Garay Herrera.