Por Elías Oxom
Unas seis mil personas de comunidades y organizaciones sociales de Alta Verapaz realizaron una caminata desde los accesos principales de la ciudad de Cobán, para luego concentrarse en el parque central, con el fin de exigir la libertad de los presos políticos en el departamento.
Divididos en cuatro grupos de personas, la movilización se llevó a cabo el pasado viernes 4 de junio, a las 8 de la mañana. El primero salió desde Santa Cruz Verapaz; el segundo desde Carchá; el tercero desde San Juan Chamelco y el cuarto grupo inició el recorrido desde la aldea China Ichab, para ingresar las 12 del mediodía al parque central de Cobán.
Durante la marcha, un grupo de personas utilizaron máscaras con el rostro de Bernardo Caal, como una forma de apoyo y demanda de su libertad.
Entre las principales demandas destacó el cese de la criminalización de los campesinos defensores de derechos humanos y del agua. Exigieron la libertad de Bernardo Caal, el líder que fue condenado a 7 años de prisión por la defensa del río Cahabón. También pidieron la libertad de Marcelino Coc y Jorge Xol, de la conunidad Choctun Basilá y, dirigentes del Comité Campesino del Altiplano (CCDA), condenados a 35 años de cárcel por los delitos de homicidio y homicidio en grado de tentativa, por hechos ocurridos en julio de 2017.
Asimismo, solicitaron el esclarecimiento del caso de Carlos Coy, de la Unión Verapacense de Organizaciones Campesinas (UVOC), quien lleva más de un año desaparecido y rechazaron las órdenes de captura de más de 962 campesinos a nivel nacional.
María Caal Xol, hermana de Bernardo, quien estuvo presente durante la marcha, expresó: “como Q’eqchi’s hemos resistido desde hace muchos años. En el sagrado Pop Vuh también aparece la historia de Junajpú e Ixbalanqué, que vencieron las pruebas de los señores de Xibalba en el sagrado río Cahabón y es por eso que actualmente el pueblo Q’eqchi’ sigue resistiendo y defendiendo con mucha dignidad los sagrados ríos”, indicó.
En el parque central leyeron un comunicado de prensa, para expresar su rechazo a las continuas y múltiples violaciones a los derechos individuales y colectivos, la estigmatización y criminalización en contra de autoridades comunitarias, por el ejercicio de las prácticas, saberes ancestrales y el mantenimiento del sistema de organización e instituciones tradicionales para la defensa de la madre tierra.
También expresaron su solidaridad y respaldo al trabajo realizado por el Procurador de los Derechos Humanos (PDH) Jordán Rodas y la Fiscalía Especial contra la Impunidad (FECI), ante los ataques de estructuras criminales y el Pacto de Corruptos.
Herbert Sandoval, coordinador del Movimiento Social Intercultural del Ixcán, comentó que “las comunidades defienden el agua, porque es la vida, defendemos la tierra y el territorio, porque es nuestra vida y sin eso no podemos vivir y exigimos el respeto a la autodeterminación de los pueblos indígenas y los derechos colectivos”, concluyó.