Por: Lourdes Alvarez
Recientemente el Colegio de Médicos y Cirujanos de Guatemala (Colmedegua) recibió críticas en diversos espacios sociales por la falta de acciones concretas para garantizar que sus agremiados realicen su trabajo de contención a la pandemia de coronavirus en óptimas condiciones.
En un comunicado emitido por ese colegio, como respuesta a la columna “El Colegio de Médicos ¿existe? de Gladys Monterroso (Diario La Hora, 7 de julio de 2020), se aseguró que: “desde el inicio de la emergencia derivada del covid-19, ha participado en mesas de discusión y presentado propuestas […] ha coadyuvado en acciones constitucionales de amparo, con el objeto de tutelar y garantizar el derecho humano a la vida, salud, e integridad física del personal de salud pública y estudiantes […] y para que la autoridad provea los suministros y equipo de protección médica necesarios ante la crisis de salud”.
No obstante, para Ángel Sánchez, médico especialista en salud pública, docente e investigador, es necesario vigilar el estricto cumplimiento de las medidas que el colegio de médicos solicita porque “no solo se trata de protestar y señalar”.
Sánchez agregó que el colegio de médicos se encuentra en condiciones de poder hacer de manera paralela varias acciones fundamentales, además de la vigilancia de la defensa gremial y la implementación de protocolos, acceso a tecnología médica, entre otros.
“La acción política es una línea paralela muy importante que se debe implementar desde el más alto nivel, porque el colegio de médicos es quien reúne todas las condiciones que el propio Estado le concede para formular normativas que permitan ejercer la profesión más allá de las condiciones actuales”, comentó Sánchez.
El especialista reiteró que esa acción política por parte del colegio permitiría la definición de las políticas y estrategias para atención a la emergencia de la covid-19 e ir más lejos, con la propia reforma del sistema de salud.
Si bien, el colegio de médicos ha aportado insumos de protección personal a 23 asociaciones de médicos departamentales y ha requerido la dignificación salarial de los médicos, para el salubrista Adrián Chávez, del Área de Salud del Instituto de Problemas Nacionales (IPN) de la Universidad de San Carlos (USAC), no debe olvidarse que alrededor del 50 por ciento sigue trabajando sin recursos y comprando sus propios equipos.
“Eso es lo que da coraje y es una vergüenza total, porque hay recursos como nunca antes lo hubo para poder equipar al sistema de salud. Si la población puede hacer las gestiones para comprar y luego donar al personal que está en primera línea ¿cuál es la justificación de las unidades ejecutoras para no hacer los procedimientos administrativos necesarios?”, cuestionó Chávez.
Añadió que el pronunciamiento del colegio de médicos a favor de los trabajadores de salud es algo que se solicitó y se esperaba, pero que debe ser contundente sobre lo que se espera del Ministerio de Salud para que vaya cumpliendo con la ejecución de su propio gasto.
Ambos especialistas coinciden en que es fundamental aprovechar las condiciones a partir de la pandemia de coronavirus para la organización de un sistema de salud público y universal que sea capaz de responder a lo que la población guatemalteca necesita en todo momento.
Según la tesis doctoral de Sánchez, tomaría unos tres años la reorganización de la atención primaria en salud a un costo aproximado de US$200 millones anuales y en dos períodos gubernamentales ya se verían resultados en el sistema de atención universal.
Solicitudes de los médicos en primera línea
El Comité ad hoc de la Dignificación de los Profesionales de la Salud y Afines, también manifestó falta de representatividad por parte del colegio de médicos ante la muerte de sus colegas y las amenazas que enfrentan por no guardar silencio.
Desde el 14 de julio presentó oficialmente sus demandas al Gobierno de la República y a la Junta Directiva del colegio de médicos: un seguro de vida para los que laboran en primera línea, equipo adecuado y en cantidad suficiente, pago del salario justo y en tiempo, resarcimiento económico para las familias de los fallecidos por covid1-19, vigilar las pruebas para diagnóstico de covid-19, dotar de medicamentos necesarios y confiables y dotar de un plan estratégico que alcance a toda la población en el momento de contar con una vacuna.