Por Jimmy Alvarado
El encuentro anual de la empresa privada sirvió para confirmar que la ANEP dejará de asumir el rol de oposición que jugó en los últimos diez años. Los empresarios se distancian de la tensa relación que sostuvieron con Nayib Bukele en la campaña electoral. Durante el ENADE 2019, la empresa privada confirmó un giro con respecto a la postura que había mantenido frente a los últimos dos gobiernos.
La Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP) hizo un viraje con respecto al rol opositor que jugó durante los últimos diez años de gobiernos del FMLN y se confirma como colaboradora del que fuera su principal adversario político durante la campaña presidencial, Nayib Bukele. Durante el Encuentro Nacional de la Empresa Privada 2019, denominado “Infraestructura sostenible e innovación para el desarrollo”, Luis Cardenal, presidente de la gremial, sentó postura sobre el rol de la empresa privada frente al Gobierno y aclaró que no será oposición.
“El Gobierno ha enviado señales positivas: afirmar que la empresa privada es necesaria para el desarrollo y la generación de empleos es una de las buenas señales”, explicó a El Faro en una breve conversación. Al hacer referencia a su viraje con respecto al pasado reciente, Cardenal dijo: “Nuestro rol, como empresarios, no es ser oposición política de nadie. Lo único que pedimos (al gobierno de Bukele) es que se nos deje trabajar, reglas claras del juego, estado de derecho, respeto al balance de poderes, a la democracia y a las libertades que tenemos los ciudadanos”. El presidente de la gremial de la Empresa Privada dijo a El Faro que durante estos cinco meses de gobierno el presidente Nayib Bukele está enviando “señales positivas al sector privado”.
Durante su discurso, el presidente de la ANEP describió un El Salvador estable y lo comparó con una Centroamérica cada vez más convulsa. Una descripción que Bukele retomó para hablar bien de su gestión. El evento, celebrado el 25 de noviembre en el hotel Sheraton Presidente, convoca cada año a la mayoría de grandes empresarios del país.
En la última década, la ANEP asumió el rol de oposición política de los gobiernos del FMLN. Jorge Daboub, expresidente de la ANEP, reconoció a este medio que habían desempeñado ese rol. “En algún momento (con el FMLN) nos tocó ser oposición. La gente nos asignó ese rol cuando no había oposición”, dijo. Uno de los episiodios que muestra esa tensión ocurrió en el ENADE de 2015, cuando los empresarios confrontaron al entonces presidente Salvador Sánchez Cerén. En aquel encuentro de empresarios, el mandatario mencionó le necesidad de obtener más recursos a través de mayor tributación para hacer frente a la violencia en el país. Daboub le contestó que en concepto de responsabilidad social empresarial el sector privado ya hacía mucho por el país para reducir los índices de violencia. En la noche del lunes 4 de mayo de 2015, el gobierno liberó un reporte con los nombres de 211 empresas y 46 personas naturales que adeudaban dinero al fisco.
Lo ocurrido en el encuentro de empresarios confirma un giro y mejora el ya favorable escenario político de un presidente que ha logrado debilitar a los partidos opositores. Tras arrasar en las elecciones presidenciales de febrero de 2019, y a cinco meses de haber asumido el cargo, es el político más popular, según todas las encuestas. LPG Datos, en agosto de 2019, registró que cuenta con el 90 % de aprobación de los salvadoreños. Aunque no tiene representación formal en la Asamblea Legislativa, el 14 de noviembre de 2019, logró que el nuevo presidente, Mario Ponce, se sumará a su red de apoyos y anunció que abría “una nueva era” de colaboración entre su Gobierno y ese órgano del Estado. “Definitivamente el liderazgo ha dado un giro de 180 grados”, dijo Bukele. Ese acto se suma al respaldo de un grupo de diputados de Arena, que han sido excluidos de las reuniones de dicho partido, y al apoyo de una decena de diputados del partido Gana con el que conquistó la presidencia en febrero de 2019. Los aplausos de los empresarios y el giro de la ANEP favorecen su escenario despejado de opositores fuertes.
“El Salvador es un país de oportunidades”
Durante el discurso principal del evento, Luis Cardenal hizo una repaso por la situación de Centroamérica. Habló de una Honduras plagada por el narco. “Honduras era el niño bonito de Centroamérica. Hubo una reelección presidencial que violó la Constitución y hay acusaciones de narcotráfico contra (Tony Hernández) el hermano del presidente (Juan Orlando Hernández)”. Habló de una Costa Rica que enfrenta problemas de gobernabilidad. “En Costa Rica gobierna una coalición que está pegada con saliva”. De Nicaragua dijo que era ya conocido por todos lo que sucedía ahí. “No puede haber crecimiento económico si nos olvidamos de las instituciones”, dijo.
Cardenal concluyó su ponencia elaborando una descripción optimista de El Salvador. “Hubo elecciones y los resultados fueron respetados. El Salvador se escucha en el ámbito internacional como un país de oportunidades. Eso no va a durar toda la vida. Hay que aprovecharlo”, dijo Cardenal.
Bukele retomó el discurso de Cardenal para hacer énfasis en que El Salvador se encuentra libre de convulsión social y que eso es favorable para los empresarios. “En Costa Rica, los sindicatos están en la calle y aunque no tienen convulsión enfrentan un déficit fiscal insostenible”. De Honduras, mencionó la represión del Gobierno. “Tienen un Gobierno que mata gente para mantenerse en el poder”. De Nicaragua, hizo alusión a las noticias sobre comandos de Ortega que han irrumpido en iglesias. “El gobierno promueve el ataque a feligreses en iglesias y el secuestro de periodistas”.
El presidente Bukele, para complementar la lectura de país realizada por el presidente de la ANEP, pidió a los empresarios poner atención a lo que sucede en Chile y aludió a “las manifestaciones en las calles y conatos de violencia contra algunos comercios”. Para contextualizar su idea, Bukele usó como ejemplo el partido político que promueve, Nuevas Ideas: “La gente sí salió a las calles, a votar. 200 mil personas para firmar un movimiento para constituir un partido político. Eso hubiera sido una manifestación masiva en El Salvador si en lugar de ir a firmar hubieran salido con pancartas o a manchar edificios a destruir propiedad pública o privada.” Nuevas Ideas es, según todas las encuestas, el partido político llamado a convertirse en primera fuerza en las próximas elecciones de alcaldes y diputados. Al final de su discurso, el presidente Bukele fue aplaudido.
El ENADE de este año marca un antes y un después de la tensa relación que sostuvo el ahora mandatario con la empresa privada durante la campaña presidencial pasada. Meses antes de las elecciones, Nayib Bukele mantenía una postura beligerante con los grandes empresarios, principalmente los dos periódicos más grandes del país.
El 4 de diciembre de 2018, Bukele retó a los partidos políticos a que eliminaran la Contribución Especial a la Seguridad Ciudadana (CESC), un impuesto a la telefonía y a los artículos tecnológicos. “Entiendo que se necesitan fondos para la seguridad, de hecho se necesitan muchos más. Pero como lo he planteado muchas veces, esos fondos se pueden obtener del combate a la evasión y elusión fiscal, gravando bienes de lujo y poniéndole impuestos a los periódicos… no gravando a la telefonía, que afecta a todo el pueblo; ni a la tecnología, que limita aún más el acceso a internet (cuando deberíamos estar fomentándolo)”, publicó en su cuenta de Twitter.
A cambio, propuso gravar con impuestos a los grandes periódicos impresos e implementar impuestos a los productos suntuarios. “Poner inmediatamente a los periódicos, los MISMOS impuestos que pagamos todos; poner un impuesto del 1 % a las propiedades con un valor arriba de $500 000 y poner un arancel especial del 10 % a los bienes de súper lujo, como yates, o vehículos con precios arriba de $80 000”. Dicha propuesta lo llevó a cuestionar al partido político en el creció. El 4 de febrero de 2016, cuestionó al FMLN y a Salvador Sánchez Cerén por promover la aprobación del CESC. “Para golpear al 100 % del pueblo con el impuesto a la telefonía son valientes, pero para que los Dutriz y Altamirano paguen, no. Cobardes”, publicó en su cuenta de Twitter el 4 de febrero de 2016. Los Dutriz son los dueños de La Prensa Gráfica y los Altamirano de El Diario de Hoy. Tras su toma de posesión, el mandatario no ha vuelto a hacer referencia estas medidas.
La tensión entre el presidente de la ANEP y el entonces candidato, Nayib Bukele, se ventiló en público a través de Twitter. El 6 de julio de 2018, Luis Cardenal se pronunció a favor de una Ley de Zonas Económicas Especiales que iba a permitir crear zonas territoriales regidas por normativas tributarias, ambientales, laborales distintas a las contempladas en la legislación salvadoreña para atraer inversión privada en la zona oriental. “El Salvador debería ser una Zona Económica Especial”, dijo Cardenal en el programa de televisión Ocho en Punto. Bukele compartió la frase de Cardenal en su cuenta de Twitter con un comentario sarcástico, “Traducción: Privaticemos todo El Salvador”.
Mario Durán, quien ahora ocupa el cargo de ministro de Gobernación, también retomó la frase y calificó a Cardenal como parte de “losmismosdesiempre”. Esa etiqueta fue usada por el equipo de campaña de Bukele para catalogar a sus contrincantes. “La avaricia es insaciable en los mismos de siempre, aquí está Luis Cardenal adelantando el plan de gobierno de @jccalleja. Privatizar hasta el último recurso del pueblo esa es la misión de Luis Cardenal, Carly Calleja y compañía”, escribió Durán en su cuenta de Twitter.
Cinco meses después, el desencuentro ha sido superado. Acompañado de Luis Cardenal y de Roberto Kriete, Bukele firmó una acuerdo con la ANEP y se comprometió a consultar al sector privado sobre las políticas públicas que afecten a dicho sector. “Vamos a trabajar de la mano con el sector privado. Por ejemplo, si es una política energética, hablaremos con los empresarios de ese sector…”, aseguró Bukele.
En la conferencia de prensa, estaban empresarios que apoyaron al rival de Bukele en las elecciones presidenciales. Estaba Roberto Kriete y Alejandro Dueñas, quienes se decantaron durante las elecciones internas de Arena por Carlos Calleja, el heredero de la poderosa cadena de supermercados Súper Selectos, quien quedó en un distante segundo lugar en la elección presidencial de febrero de 2019.
En su intervención, el presidente también atacó al FMLN, el que fue su partido desde 2012 hasta octubre de 2017 . “La pésima relación del Gobierno con el sector privado fue el motivo del pésimo desempeño económico. Vamos a fortalecer la relación con el empresariado y vamos a incrementar el índice de confianza de los empresarios”, prometió. El Producto Interno Bruto (PIB) de El Salvador ha tenido un crecimiento promedio que apenas ha superado el 2 % del PIB en la última década, a la zaga del resto de países de Centroamérica. Según datos oficiales, la proyección de crecimiento del próximo es del 2.5 %.
El Faro abordó en un pasillo del Hotel Sheraton al presidente de Avianca, Roberto Kriete, y al presidente de la Asociación Salvadoreña de Industriales, Eduardo Cáder, para conocer sus opiniones sobre las señales que el nuevo Gobierno ha enviado al sector privado y sobre el rol que considera que debe jugar la Anep con el nuevo gobierno. Ambos respondieron que no iban a dar declaraciones. “No tengo tiempo”, dijo Kriete al pedirle una breve declaración al respecto. Cáder también dijo que en ese momento que podía dar declaraciones. El Faro ha pedido una entrevista con el presidente de la ASI para ampliar en las posturas de dicha institución.
Javier Simán, quien fue precandidato presidencial de Arena y quien dirigió a la Asociación Salvadoreña de Industriales Salvadoreños (ASI), sí dio declaraciones a El Faro. Según dijo, la empresa privada debe jugar un rol de “colaborador” con el gobierno de Bukele. “El sector privado no toma bandos. Debe jugar un rol de colaborador y debe vigilar que se respete la Constitución y la institucionalidad”.
A inicios de octubre, el Ministerio de Trabajo, el Ministerio de Salud y el Ministerio de Hacienda anunciaron investigaciones contra la empresa Sistemas Comestibles, dueño de la marca Mister Donut, y el presidente Nayib Bukele se enfrascó en una confrontación pública en redes sociales con el empresario Adolfo Salume, a quien señaló de ser el propietario de la Revista Factum. Esa revista reveló que una empresa de Albapetróleos, Inverval, otorgó un préstamo de $1.9 millones a Nayib Bukele cuando era alcalde de Nuevo Cuscatlán. A las investigaciones anunciadas, le siguió el cierre de cinco restaurantes de la cadena de Salume.
Consultado por el cierre de los Mister Donut, Simán dijo: “hay que tener cuidado que las instituciones no sean usadas para hacer persecución política”. Luego matizó sus palabras: “Si tres instituciones se concentran en una empresa… Alguien dio la orden, aunque probablemente lo ameritara…”
” Nuestro rol, como empresarios, no es ser oposición política”
– ¿Considera que el presidente Bukele ha enviado señales que preocupan al sector privado? – preguntó El Faro a Cardenal.
-El Gobierno ha enviado señales positivas: afirmar que la empresa privada es necesaria para el desarrollo y la generación de empleos es una de las buenas señales.
-¿Cuál es el rol que debe desempeñar el sector privado con el gobierno?
– Nuestro rol, como empresarios, no es ser oposición política de nadie. Lo único que pedimos (al gobierno de Bukele) es que se nos deje trabajar, reglas claras del juego, estado de derecho, respeto al balance de poderes, a la democracia y a las libertades que tenemos los ciudadanos.
– En algún momento, la ANEP dirigida por Jorge Daboub llegó a ocupar un rol de oposición con los gobiernos del FMLN. ¿Plantea que con el gobierno de Bukele debe ser distinto?
-Nosotros defendemos principios y algunos eso lo pueden ver como ser oposición.
Al preguntarle si los cierres de algunos locales de Mister Donut mandaban una señal negativa al sector privado, Cardenal dijo que son las instancias judiciales las que deben pronunciarse al respecto y que en su momento emitieron un comunicado en el que se cuidaron de no describir en términos de blanco y negro la decisión de proceder en contra de esa empresa. Aunque luego matizó su respuesta. “No estábamos de acuerdo en que se use el poder para perseguir a nadie que fuera crítico o adversario del Gobierno, pero no íbamos a defender a nadie que violara las leyes”, manifestó Cardenal.
El antecesor de Cardenal, Jorge Daboub, marca distancia. Según dijo, el presidente Bukele ha enviado algunas señales preocupantes al sector privado. “Él ha dado señales de que está dispuesto a usar el poder del Estado para obtener lo que quiere”. Consultado sobre el posicionamiento de Cardenal de que a la Anep no le corresponde ser oposición, matizó: “Quizá lo que quiso decir (Cardenal) es que ser oposición política no nos corresponde como sector privado, pero sí nos corresponde ser oposición a malas políticas públicas y a exigir que se respete la institucionalidad y separación de poderes”.
“El Salvador es un país de oportunidades”
Durante el discurso principal del evento, Luis Cardenal hizo una repaso por la situación de Centroamérica. Habló de una Honduras plagada por el narco. “Honduras era el niño bonito de Centroamérica. Hubo una reelección presidencial que violó la Constitución y hay acusaciones de narcotráfico contra (Tony Hernández) el hermano del presidente (Juan Orlando Hernández)”. Habló de una Costa Rica que enfrenta problemas de gobernabilidad. “En Costa Rica gobierna una coalición que está pegada con saliva”. De Nicaragua dijo que era ya conocido por todos lo que sucedía ahí. “No puede haber crecimiento económico si nos olvidamos de las instituciones”, dijo.
Cardenal concluyó su ponencia elaborando una descripción optimista de El Salvador. “Hubo elecciones y los resultados fueron respetados. El Salvador se escucha en el ámbito internacional como un país de oportunidades. Eso no va a durar toda la vida. Hay que aprovecharlo”, dijo Cardenal.
Bukele retomó el discurso de Cardenal para hacer énfasis en que El Salvador se encuentra libre de convulsión social y que eso es favorable para los empresarios. “En Costa Rica, los sindicatos están en la calle y aunque no tienen convulsión enfrentan un déficit fiscal insostenible”. De Honduras, mencionó la represión del Gobierno. “Tienen un Gobierno que mata gente para mantenerse en el poder”. De Nicaragua, hizo alusión a las noticias sobre comandos de Ortega que han irrumpido en iglesias. “El gobierno promueve el ataque a feligreses en iglesias y el secuestro de periodistas”.
El presidente Bukele, para complementar la lectura de país realizada por el presidente de la ANEP, pidió a los empresarios poner atención a lo que sucede en Chile y aludió a “las manifestaciones en las calles y conatos de violencia contra algunos comercios”. Para contextualizar su idea, Bukele usó como ejemplo el partido político que promueve, Nuevas Ideas: “La gente sí salió a las calles, a votar. 200 mil personas para firmar un movimiento para constituir un partido político. Eso hubiera sido una manifestación masiva en El Salvador si en lugar de ir a firmar hubieran salido con pancartas o a manchar edificios a destruir propiedad pública o privada.” Nuevas Ideas es, según todas las encuestas, el partido político llamado a convertirse en primera fuerza en las próximas elecciones de alcaldes y diputados. Al final de su discurso, el presidente Bukele fue aplaudido.
El ENADE de este año marca un antes y un después de la tensa relación que sostuvo el ahora mandatario con la empresa privada durante la campaña presidencial pasada. Meses antes de las elecciones, Nayib Bukele mantenía una postura beligerante con los grandes empresarios, principalmente los dos periódicos más grandes del país.
El 4 de diciembre de 2018, Bukele retó a los partidos políticos a que eliminaran la Contribución Especial a la Seguridad Ciudadana (CESC), un impuesto a la telefonía y a los artículos tecnológicos. “Entiendo que se necesitan fondos para la seguridad, de hecho se necesitan muchos más. Pero como lo he planteado muchas veces, esos fondos se pueden obtener del combate a la evasión y elusión fiscal, gravando bienes de lujo y poniéndole impuestos a los periódicos… no gravando a la telefonía, que afecta a todo el pueblo; ni a la tecnología, que limita aún más el acceso a internet (cuando deberíamos estar fomentándolo)”, publicó en su cuenta de Twitter.
A cambio, propuso gravar con impuestos a los grandes periódicos impresos e implementar impuestos a los productos suntuarios. “Poner inmediatamente a los periódicos, los MISMOS impuestos que pagamos todos; poner un impuesto del 1 % a las propiedades con un valor arriba de $500 000 y poner un arancel especial del 10 % a los bienes de súper lujo, como yates, o vehículos con precios arriba de $80 000”. Dicha propuesta lo llevó a cuestionar al partido político en el creció. El 4 de febrero de 2016, cuestionó al FMLN y a Salvador Sánchez Cerén por promover la aprobación del CESC. “Para golpear al 100 % del pueblo con el impuesto a la telefonía son valientes, pero para que los Dutriz y Altamirano paguen, no. Cobardes”, publicó en su cuenta de Twitter el 4 de febrero de 2016. Los Dutriz son los dueños de La Prensa Gráfica y los Altamirano de El Diario de Hoy. Tras su toma de posesión, el mandatario no ha vuelto a hacer referencia estas medidas.
La tensión entre el presidente de la ANEP y el entonces candidato, Nayib Bukele, se ventiló en público a través de Twitter. El 6 de julio de 2018, Luis Cardenal se pronunció a favor de una Ley de Zonas Económicas Especiales que iba a permitir crear zonas territoriales regidas por normativas tributarias, ambientales, laborales distintas a las contempladas en la legislación salvadoreña para atraer inversión privada en la zona oriental. “El Salvador debería ser una Zona Económica Especial”, dijo Cardenal en el programa de televisión Ocho en Punto. Bukele compartió la frase de Cardenal en su cuenta de Twitter con un comentario sarcástico, “Traducción: Privaticemos todo El Salvador”.
Mario Durán, quien ahora ocupa el cargo de ministro de Gobernación, también retomó la frase y calificó a Cardenal como parte de “losmismosdesiempre”. Esa etiqueta fue usada por el equipo de campaña de Bukele para catalogar a sus contrincantes. “La avaricia es insaciable en los mismos de siempre, aquí está Luis Cardenal adelantando el plan de gobierno de @jccalleja. Privatizar hasta el último recurso del pueblo esa es la misión de Luis Cardenal, Carly Calleja y compañía”, escribió Durán en su cuenta de Twitter.
Cinco meses después, el desencuentro ha sido superado. Acompañado de Luis Cardenal y de Roberto Kriete, Bukele firmó una acuerdo con la ANEP y se comprometió a consultar al sector privado sobre las políticas públicas que afecten a dicho sector. “Vamos a trabajar de la mano con el sector privado. Por ejemplo, si es una política energética, hablaremos con los empresarios de ese sector…”, aseguró Bukele.
En la conferencia de prensa, estaban empresarios que apoyaron al rival de Bukele en las elecciones presidenciales. Estaba Roberto Kriete y Alejandro Dueñas, quienes se decantaron durante las elecciones internas de Arena por Carlos Calleja, el heredero de la poderosa cadena de supermercados Súper Selectos, quien quedó en un distante segundo lugar en la elección presidencial de febrero de 2019.
En su intervención, el presidente también atacó al FMLN, el que fue su partido desde 2012 hasta octubre de 2017 . “La pésima relación del Gobierno con el sector privado fue el motivo del pésimo desempeño económico. Vamos a fortalecer la relación con el empresariado y vamos a incrementar el índice de confianza de los empresarios”, prometió. El Producto Interno Bruto (PIB) de El Salvador ha tenido un crecimiento promedio que apenas ha superado el 2 % del PIB en la última década, a la zaga del resto de países de Centroamérica. Según datos oficiales, la proyección de crecimiento del próximo es del 2.5 %.
El Faro abordó en un pasillo del Hotel Sheraton al presidente de Avianca, Roberto Kriete, y al presidente de la Asociación Salvadoreña de Industriales, Eduardo Cáder, para conocer sus opiniones sobre las señales que el nuevo Gobierno ha enviado al sector privado y sobre el rol que considera que debe jugar la Anep con el nuevo gobierno. Ambos respondieron que no iban a dar declaraciones. “No tengo tiempo”, dijo Kriete al pedirle una breve declaración al respecto. Cáder también dijo que en ese momento que podía dar declaraciones. El Faro ha pedido una entrevista con el presidente de la ASI para ampliar en las posturas de dicha institución.
Javier Simán, quien fue precandidato presidencial de Arena y quien dirigió a la Asociación Salvadoreña de Industriales Salvadoreños (ASI), sí dio declaraciones a El Faro. Según dijo, la empresa privada debe jugar un rol de “colaborador” con el gobierno de Bukele. “El sector privado no toma bandos. Debe jugar un rol de colaborador y debe vigilar que se respete la Constitución y la institucionalidad”.
A inicios de octubre, el Ministerio de Trabajo, el Ministerio de Salud y el Ministerio de Hacienda anunciaron investigaciones contra la empresa Sistemas Comestibles, dueño de la marca Mister Donut, y el presidente Nayib Bukele se enfrascó en una confrontación pública en redes sociales con el empresario Adolfo Salume, a quien señaló de ser el propietario de la Revista Factum. Esa revista reveló que una empresa de Albapetróleos, Inverval, otorgó un préstamo de $1.9 millones a Nayib Bukele cuando era alcalde de Nuevo Cuscatlán. A las investigaciones anunciadas, le siguió el cierre de cinco restaurantes de la cadena de Salume.
Consultado por el cierre de los Mister Donut, Simán dijo: “hay que tener cuidado que las instituciones no sean usadas para hacer persecución política”. Luego matizó sus palabras: “Si tres instituciones se concentran en una empresa… Alguien dio la orden, aunque probablemente lo ameritara…”
” Nuestro rol, como empresarios, no es ser oposición política”
– ¿Considera que el presidente Bukele ha enviado señales que preocupan al sector privado? – preguntó El Faro a Cardenal.
-El Gobierno ha enviado señales positivas: afirmar que la empresa privada es necesaria para el desarrollo y la generación de empleos es una de las buenas señales.
-¿Cuál es el rol que debe desempeñar el sector privado con el gobierno?
– Nuestro rol, como empresarios, no es ser oposición política de nadie. Lo único que pedimos (al gobierno de Bukele) es que se nos deje trabajar, reglas claras del juego, estado de derecho, respeto al balance de poderes, a la democracia y a las libertades que tenemos los ciudadanos.
– En algún momento, la ANEP dirigida por Jorge Daboub llegó a ocupar un rol de oposición con los gobiernos del FMLN.
¿Plantea que con el gobierno de Bukele debe ser distinto?
-Nosotros defendemos principios y algunos eso lo pueden ver como ser oposición.
Al preguntarle si los cierres de algunos locales de Mister Donut mandaban una señal negativa al sector privado, Cardenal dijo que son las instancias judiciales las que deben pronunciarse al respecto y que en su momento emitieron un comunicado en el que se cuidaron de no describir en términos de blanco y negro la decisión de proceder en contra de esa empresa. Aunque luego matizó su respuesta. “No estábamos de acuerdo en que se use el poder para perseguir a nadie que fuera crítico o adversario del Gobierno, pero no íbamos a defender a nadie que violara las leyes”, manifestó Cardenal.
El antecesor de Cardenal, Jorge Daboub, marca distancia. Según dijo, el presidente Bukele ha enviado algunas señales preocupantes al sector privado. “Él ha dado señales de que está dispuesto a usar el poder del Estado para obtener lo que quiere”. Consultado sobre el posicionamiento de Cardenal de que a la Anep no le corresponde ser oposición, matizó: “Quizá lo que quiso decir (Cardenal) es que ser oposición política no nos corresponde como sector privado, pero sí nos corresponde ser oposición a malas políticas públicas y a exigir que se respete la institucionalidad y separación de poderes”.
via elFaro