Los vecinos del caserío San Francisco de la aldea Yich’ kisis de San Mateo Ixtatán, fueron intimidados nuevamente por un fuerte contingente de elementos de la Policía Nacional Civil PNC y militares que permanecen dentro de las instalaciones de la hidroeléctrica propiedad de la empresa Renovación y Energía SA.
El caserío que se ubica a escasos metros de la construcción de la empresa, en dónde guardan la maquinaria y materiales de construcción, no es la primera vez que sufren este tipo de agresiones psicológicas e intimidaciones por parte de las autoridades de seguridad del estado, que ponen en riesgo a las familias de los comunitarios.
Alrededor de las 2 de la tarde, del sábado 2 de febrero arribaron varios vehículos polarizados tipo pick ups Toyota Hilux particulares que transportaron a unos 50 elementos del ejército y de la policía fuertemente armados, los ubicaron en las cercanías de las casas que forman del caserío y luego se desplegaron entre los matorrales, la gente no sabe cuál es el motivo de este despliegue.
Para las comunidades que se oponen a la construcción de las hidroeléctricas, cada vez que esto ocurre se provoca crisis nerviosa en niños, mujeres y ancianos, en enero de 2017 en ese mismo lugar la seguridad privada de la empresa asesinó a un anciano al finalizar una marcha pacífica.
El destacamento militar se ubica dentro de la propiedad de la empresa EYR, lo mismo ocurre con la comisaria 43 de la PNC y solamente se dedican a proteger las instalaciones de la empresa, para las familias residentes de este caserío creen que las acciones que realizan estos elementos son para intimidarlos, para no seguir con su lucha en defensa de sus bienes naturales y su territorio.
Pidieron a las autoridades de derechos humanos y a la comunidad internacional que investiguen las constantes intimidaciones que sufren por agentes de la seguridad estatal.