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Exigimos al ministerio Público y a las instancias gubernamentales correspondientes, que investiguen de manera inmediata esta agresión contra la vida de nuestros hermanos y dar con los responsables intelectuales y materiales de este repudiable hecho.
Nos solidarizamos con las víctimas y las familias del Pueblo Kaqchikel, que han sido agredidas, por ejercer su legítimo derecho de defender su territorio. No tenemos ninguna duda de que esta agresión proviene de las empresas transnacionales y sus socios locales interesadas en apropiarse de las tierras para imponer sus proyectos de explotación de los bienes naturales.
¡¡Por la defensa de la vida y el territorio!!