El Comité Cívico Crecer, busca tomar la silla edil del municipio en San Marcos. Esta propuesta de corporación la encabeza Isel Aneli Suñiga Morfin, hija del exalcalde requerido por la DEA.
Por Prensa Comunitaria
En Ayutla, San Marcos, los candidatos a la alcaldía empiezan a mostrarse públicamente y a buscar adeptos que representarán votos para las elecciones. Una de ellas es Isel Aneli Suñiga Morfin.
Suñiga Morfin, de 28 años, fue Miss Guatemala en 2017, es hija del exalcalde Erick Salvador Suñiga Rodríguez, quien fue requerido por la Administración para el Control de Drogas (DEA), en 2019.
La joven madre ahora está con el comité cívico Crecer y la presentaron ante el Registro de Ciudadanos como candidata a la alcaldía de esa localidad. Esta unidad del Tribunal Supremo Electoral declaró con lugar la inscripción y se preparan para iniciar con la campaña.
A pesar de esto, en las redes sociales del comité cívico y de la misma Isel Suñiga, se le observa que está en constantes actividades públicas con personas de la localidad y también en las asambleas para proclamación de candidatos.
El Pocho, como era conocido Suñiga por los locales, llegó a la alcaldía en 2008 con el Partido Unionista, luego fue reelecto por la coalición UNE-Gana. Después formó el comité cívico Crecer, con el que obtuvo su tercer periodo consecutivo en la silla edil, hasta que se entregó a la DEA, el 19 de diciembre de 2019.
Las investigaciones de las autoridades de Estados Unidos lo vincularon como uno de los personajes que era proveedor del cartel de Sinaloa, para el trasiego de drogas. Al entregarse fue extraditado y la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC), a cargo del Departamento del Tesoro, también ubicó en su lista negra a Súñiga, cuatro de sus socios, entre ellos familiares y cuatro empresas de las que era propietario.
La Embajada de Estados Unidos en Guatemala informó que El Pocho era un “narcotraficante extranjero relevante” y era líder de una organización internacional de trasiego de cocaína llamada “Los Pochos”.
Los dos hermanos del alcalde, José Juan Súñiga Rodríguez y Alex Oswaldo Parada Rodríguez, conocido como la Pantera, también fueron identificados como los facilitadores del apoyo financiero, tecnológico y de servicios a la organización que traficaba drogas.
La entrega del exalcalde duró al menos ocho meses, ya que se inició el proceso para retirarle la inmunidad, pero con recursos legales buscaban detener el proceso de extradición. Luego de varios meses, Suñiga se entregó y además se conoció de su estado de salud. Padecía cáncer.
En abril de 2020, se dio a conocer que Suñiga murió en la cárcel donde permanecía desde que se entregó. El cáncer provocó el deterioro de su salud. Desde entonces ya se hacía más notoria la presencia de su hija mayor en actividades de la municipalidad de Ayutla.
Una fuente de la localidad, quien prefirió omitir su nombre por seguridad, dijo que la hija de El Pocho ha sido constante en actividades que se realizaban en el municipio. Durante la pandemia también coordinó varios proyectos y así mantener el control.
“Su trabajo no es nada más por el amor al municipio, ella busca quedar en el lugar que dejó su papá, eso toda la comunidad lo sabe”, dijo.
El Pocho pretendía buscar la presidencia después de 12 años en la alcaldía y su sucesora sería su hija, a pesar de que sus planes se truncaron con la investigación de la DEA, el plan de Isel para llegar a la alcaldía continúa y se prepara para los comicios del 2023.
No solo en la alcaldía había control también tienen una iglesia
La fuente consultada comenta que en el municipio de Ayutla es notorio el control que ejerce la familia de El Pocho, no solo por el tema político, sino también religioso.
El exalcalde también tenía su faceta como pastor. La iglesia Ministerios de Restauración y Paz fue fundada por él, es un edificio moderno, a donde llegan cientos de personas en cada una de las reuniones y hace al menos cinco años, todavía predicaba Suñiga.
Prosperidad, éxito y fe, son los principales temas que se abordan en las enseñanzas de este templo religioso. Desde la muerte de El Pocho, las hijas son quienes figuran en la iglesia, son parte activa y también son reconocidas como pastoras.
“Saben que es un lugar en donde tendrán asegurados los votos, por eso es que también tienen mucha influencia en la iglesia evangélica”, aseguró.
Ahora, el comité cívico Crecer sigue siendo popular en la comunidad, el cambio de figura para quedarse con la silla edil cambia, pero es la misma familia que mantendría el control en el municipio.
