
Día 11: Emma Molina Theissen rompe el silencio y da testimonio.
Tiempo de lectura: 4 minutosTexto y fotografías: Juan Calles Imagine usted la cara sonriente de una niña de su familia, imagine los gestos de su hijo menor cuando está contento. Cualquier niño o niña es causa irremediable de ternura y felicidad. Ahora imagine que ese niño o niña que usted ama se lo arrebatan de sus brazos para jamás volver a verle. Es una pesadilla horrorosa, es el acto de maldad máxima. Al inicio de la década de 1980, el Ejército de Guatemala secuestró y desapareció a miles niños