Por Nanci Sinto
5 de septiembre 2019
Cada 5 de septiembre se recuerda a Bartolina Sisa. Una mujer aymara, una referente que lucho por la emancipación y liberación de los pueblos, consolidando una gran rebelión anticolonial y que fue asesinada y desmembrada por los españoles al amanecer de un 5 de septiembre de 1782, en la paz, Bolivia.
El Día Internacional de la Mujer Indígena fue instituido en el segundo Encuentro de Organizaciones y Movimientos de Mujeres Indígenas en América en la ciudad arqueológico de Tihuanacu, en honor a la lucha de Bartolina Sisa. Para nosotras ella es una figura que simboliza las innumerables batallas que libraron y liberan contra las injusticias el pueblo aymara y quechua.
En Guatemala, las Bartolinas de hoy son mujeres mayas, xinkas y garífunas, que, a pesar de estar inmersas en un mundo globalizado, luchan a diario contra la dominación, la opresión, el racismo, el extractivismo, la violencia y el patriarcado.
Las mujeres mayas, xinka y garífunas son las Bartaolinas que ya no están y que previo a la colonización cultivaron en nosotras vida, saber, conocimiento, sabiduría, fuerza y resistencia para luchar por nuestros derechos individuales y colectivos. Somos las mujeres quienes a lo largo de la historia hemos defendido la vida, los recursos naturales.
Somos protectoras y tejedoras de nuestra indumentaria, somos parteras y comadronas dadoras de vida, curanderas, autoridades indígenas, sobrevivientes del conflicto armado interno, académicas, artistas pintoras, poetas, cantautoras. Siempre tendremos medios donde denunciar las injusticias y demandaremos mejores condiciones para erradicar la violencia, migración, analfabetismo, impunidad, racismo y discriminación. Somos quienes protegemos y promovemos el idioma, contamos nuestra historia, esa historia que nos han ocultado, pero tenemos memoria.
Aquí estamos resistiendo ante el Estado criollo, racista y patriarcal que ha criminalizado nuestras luchas, folclorizado y comercializado nuestra indumentaria, explotado a la madre tierra, perseguido y privado de libertad a muchas mujeres defensoras de derechos humanos y de la vida. Aquí estamos las mujeres que hacemos comunicación alternativa, aquí estamos las artistas, aquí estamos las mujeres organzidas para demandar y exigir al Estado que respete nuestras formas de vida y que genere mejores condiciones para poder acceder a educación, justicia, salud, vivienda y trabajo digno.
¡Todas somos Bartolina Sisa!