Don Cromañón no podía quedar atrás
Tiempo de lectura: 2 minutosPor: Francisco Rodas (sobre la columna ¿Por que tanta prisa? http://elperiodico.com.gt/opinion/2017/02/16/por-que-tanta-prisa) Su punto de partida, sabiendo la caverna en que habita, es predecible que su posición sea objetar y sospechar de las reformas a la Constitución. Desde ahí, su condena la dirige hacia señalar, según sus palabras, que las reformas se hayan originado en el seno de una entidad que no ha sido legalmente facultada para ello. O sea que los chapines — él no lo es ―, no metimos narices en eso. Pero con