Esta sentencia confirma la tesis de investigación que presentó el exfiscal Stuardo Campo, actualmente criminalizado y en prisión, sobre deficiencias estructurales y financieras en la obra que costó al Estado más de Q500 millones. Benito se suma a los empresarios que admitieron su participación en los hechos.
Por Alexander Valdéz
El exministro de comunicaciones José Luis Benito se declaró culpable de fraude al haber autorizado la construcción del Libramiento de Chimaltenango, durante el gobierno de Jimmy Morales. Una obra que costó al Estado más de Q500 millones. Benito estuvo en prisión por ese caso y salió de la cárcel en junio de este año bajo arresto domiciliario.
El exfuncionario, quien ya tiene una condena por ese mismo procedimiento en el caso de los Q122 millones, aceptó su participación en el entramado de corrupción que fue dirigido a defraudar al Estado. Se suma a los empresarios que admitieron su participación y fueron condenados.
Benito al haberse sometido a este procedimiento especial, no deberá ir a prisión. La jueza de mayor riesgo “A”, Claudette Domínguez, lo condenó a nueve años de cárcel, pero, por haberse sometido a un procedimiento especial de cargos, se redujo a únicamente a cuatro años y seis meses conmutables. A esa sanción también se reduce con el tiempo que ya estuvo en prisión preventiva (2 años y 27 días).
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Se ratifica la corrupción en el Libramiento de Chimaltenango
La Fiscalía contra la Corrupción señaló que el exministro del gobierno de Jimmy Morales avaló el supuesto contrato fraudulento que concedió el proyecto para la finalización de los trabajos de construcción del Libramiento de Chimaltenango.
La investigación estableció que los sindicados defraudaron al Estado de Guatemala, por medio del Ministerio de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda, en un evento de licitación pública por más de Q500 millones, afirma la Fiscalía contra la Corrupción.
Desde que se presentó la obra, debido a los constantes derrumbes los representantes de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) han realizado cierres en la autopista calificada como una “megaobra” e “hito histórico” por el expresidente Jimmy Morales.
Desde la inauguración de la obra, en 2019, los guatemaltecos que utilizan esa vía corren peligro ante los constantes desprendimientos de tierra. Hasta 2022 se habían contabilizado 22 derrumbes y deslaves de grandes proporciones.
No solo el exministro figura como acusado, por el derrumbe de esta “megaobra”, que presenta anomalías técnicas y financieras, son señaladas al menos 22 personas, quienes están pendientes de enfrentar juicio.
En julio, dos empresarios se declararon culpables en el caso de la construcción de esa obra y recibieron penas mínimas. Se trata de Carlos Enrique Figueroa Rabanales, de la Constructora Nacional S.A. (Conasa), y Jorge Alfredo Tejada Argueta, de Renova Ingenieros, S.A.
Durante la audiencia, aceptaron la culpabilidad en el delito de fraude y reconocieron haber “creado un mecanismo ilegal” para concursar y obtener la adjudicación de la vía de Chimaltenango que fue construida durante el gobierno de Jimmy Morales (2016-2020). La jueza Domínguez les impuso una pena de tres años y cuatro meses de prisión.
Los Q122 millones
En este segundo caso, en febrero de este año, el exministro logró que la jueza modificara la acusación que inicialmente había hecho la Fiscalía Especial contra la Impunidad (FECI) de Juan Francisco Sandoval. El delito de lavado de dinero se modificó por el de conspiración para cometer lavado de dinero, un tipo penal menor al que inicialmente lo tuvo ligado a proceso.
Al haberse modificado la acusación, la jueza impuso una pena menor al exministro. Se le condenó a cuatro años de cárcel y obtuvo una reducción de dos años por haber aceptado cargos. Obtuvo una pena inferior a la que recibiría de haber continuado con el proceso común. Ese fallo actualmente está suspendido por apelación de la PGN.
El 16 de octubre de 2020, el exfiscal Juan Francisco Sandoval realizó un operativo en un inmueble ubicado en el condominio Doña Beatriz, en Antigua Guatemala, Sacatepéquez, en donde se encontraron Q122 millones 351 mil 456.60 en efectivo.
Ese día, Sandoval dijo que habían recibido información de un inmueble en el que se almacenaban fuertes sumas de dinero en efectivo provenientes, posiblemente, de sobornos dirigidos hacia un funcionario de una administración gubernamental.
El dinero encontrado en la residencia estaba guardado en 20 maletas. Una de ellas tenía una identificación del exministro Benito, esa fue una de las razones por las que fue vinculado al proceso.
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Castigo para fiscales del caso
Al igual que en la FECI, los fiscales que investigaron y develaron hechos de corrupción en los pasados gobiernos fueron castigados; perseguidos y encarcelados. Mientras se confirman los hechos de corrupción en el Libramiento de Chimaltenango, los dos principales investigadores de este expediente están siendo sometidos a persecución por parte del ente investigador que dirige Consuelo Porras.
Esta pesquisa estuvo a cargo de Stuardo Campo, quien no pudo ampliar la misma a una segunda fase, de hecho, se hablaba de la vinculación de Jimmy Morales, sin embargo eso no pudo avanzar con su traslado y posterior captura. Misma situación para Eduardo Pantaleón, auxiliar fiscal separado del cargo. Estuvo en prisión y logró ratificar su inocencia en debate. La sentencia absolutoria al no estar aún firme, lo mantiene sin oportunidad de trabajar y generar ingresos.
