Por: Miguel Ángel Sandoval
Sabemos que nuestros funcionarios públicos no brillan por sus dotes intelectuales, aunque como en todo siempre hay excepciones. Si hablamos de alcaldes o alcaldesas, la de la ciudad colonial se ha destacado por su vulgaridad cultural, o dicho en otros términos, por su oposición a la cultura y a la gente. Nada de extrañar pero si mucho que señalar como la expresión de la prepotencia del cargo o de la ignorancia audaz.
En los últimos meses se destacó por su intolerancia. Lo primero que se le recuerda fue el secuestro de una diabla que iba a ser incinerada en día de Concepción como lo dice la tradición antigüeña y de ese sincretismo religioso tan especial que tenemos los guatemaltecos. En esa ocasión se dijo que se había quitado de la vía pública a la diabla por sus tetas al aire o por su parecido con la alcaldesa, no importa ni una cosa ni la otra, lo que sí debería de importarnos es la desmedida muestra de autoritarismo y de intolerancia.
No hace muchos días, fue el turno de oponerse de forma activa al homenaje del poeta Luis de Lión, al impedir que se pusieran en algunas paredes de la ciudad de Antigua, unos versos escritos evocando al poeta secuestrado y desaparecido en junio de 1984, sin que se tenga noticia de donde fueron a parar sus restos. En este caso, los organizadores del homenaje al poeta protestaron por la muestra de total intolerancia dada por la alcaldía municipal.
La tapa al pomo la puso la señora alcaldesa al prohibir la instalación de la feria anual del libro en el parque central de la ciudad colonial privando a los lectores antigüeños del derecho a la cultura, sin explicar razones y sin ponerse a pensar que ese gesto se produce días antes de la Feria Internacional del Libro (FILGUA) y con la presencia de invitados internacionales, que harían el infaltable viaje a la ciudad patrimonio cultural de la humanidad. De nuevo la señora Asensio da muestras de su prepotencia e incultura.
Es la razón por la que escritores se dan cita este domingo en la ciudad de Antigua, en el parque central al medio día, para repudiar esta medida que solo nos dice que la cultura en la ciudad colonial patrimonio de la humanidad, con la gestión de la alcaldía, se encuentra en verdaderas ruinas.