La mayoría de los 13 actuales magistrados de la Corte Suprema de Justicia obtuvieron sus puestos de forma fraudulenta con el apoyo e intervención directa de los antiguos integrantes de la alta corte del Organismo Judicial, según una investigación de la FECI de Juan Francisco Sandoval.
Por Cristian García
El caso Comisiones Paralelas 2020 es uno de los expedientes más grandes de corrupción judicial identificado en el país. Fue develado hace cuatro años y explicó la forma en la que se puede capturar todas las instancias judiciales.
La investigación involucraba a poderosos abogados, operadores políticos, diputados y comisionados. Hubo detenidos y varios enfrentaron proceso penal, aunque los fiscales preveían que los implicados superarían los tres centenares de personas.
En ese contexto, la carpeta judicial apuntaba a que los magistrados de la Corte Suprema de Justicia estaban comprometidos en un pacto ilícito para manipular la elección de sus sucesores y de las Salas de Apelaciones.
Ese acuerdo irregular, aparentemente, le permitió a diez de los integrantes de CSJ seleccionar a 68 abogados para integrar la nómina que se envió al Congreso de la República.
Esa lista se compone de 296 nombres, por lo que los magistrados habrían seleccionado a una cuarta parte de los elegibles para las cortes. El resto se lo repartieron diversos padrinos, patrocinadores u operadores.
Futuros comisionados están señalados de manipular elección de cortes
Uno de los padrinos, por ejemplo, era Estuardo Gálvez, el exrector de la Universidad de San Carlos (Usac), quien tenía derecho a ingresar en la nómina a 40 personas. Este mecanismo de asignación de cuotas se hizo en función del poder que tenían los patrocinadores en las postuladoras.
El profesor universitario consiguió esa cantidad de espacios porque tenía cuatro votos en las comisiones. Es decir, se le asignaban diez casillas conforme a la cantidad de comisionados que ostentaba en esas instancias.
Bajo los parámetros de ese método, a la Corte Suprema de Justicia le hubieran correspondido cien espacios. Sin embargo, al ser una cantidad alta, la antigua FECI sostuvo que posiblemente al distribuir los cupos no se les pudo dar la cantidad que les correspondía.
Pese a ello, a los magistrados se les concedió la mayor cifra de espacios, según la investigación. Eventualmente, varios de los abogados que apoyaron, resultaron electos para integrar las cortes y algunos de ellos los reemplazaron en sus puestos.
Por eso, Prensa Comunitaria presenta a quienes presuntamente fueron patrocinados por Silvia Valdés, Nery Medina, Vitalina Orellana, Felipe Baquiax, Sergio Pineda Castañeda, Silvia García, José Antonio Pineda Barales, Manuel Reginaldo Duarte, Néster Vásquez y Ranulfo Rojas.
La FECI mostró que el Instituto de Magistrados de Salas de Apelaciones, los decanos de Derecho y el exrector sancarlista Murphy Paiz también lograron colocar a algunas personas en la nueva Corte Suprema de Justicia.
Lo anterior se detalla a continuación junto con los antecedentes laborales de cada uno de los magistrados y sus contrataciones en el Estado, para encontrar las áreas de incidencia de cada uno de los funcionarios.
Es necesario indicar que los actuales magistrados de la Corte Suprema de Justicia, salvo Óscar Ruperto Cruz Oliva, tendrán la oportunidad de intervenir en la elección de Salas de Apelaciones de este año, aunque varios de ellos ya habrían amañado el proceso anterior.
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