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Créditos: CODECA
Tiempo de lectura: 3 minutos

 

La violencia golpea nuevamente al Comité de Desarrollo Campesino que organiza a campesinos de todo el país en un movimiento político que incomoda a sectores de poder político y económico. Según información del Comité, entre 2018 y 2022, van 25 dirigentes asesinados.

Por Juan Calles

La madrugada de este lunes 5 de diciembre se encontró el cuerpo de Tereso Cárcamo Flores, miembro de la junta comunitaria del Comité de Desarrollo Campesino (CODECA) en Santa María Xalapán, Jalapa.

Cárcamo, como otros dirigentes xinkas de la región han sido amenazados de muerte desde hace varios años, desde que la resistencia campesina en Santa María Xalapán se organizó. Las amenazas se concretaron esta madrugada cuando familiares de Cárcamo Flores encontraron su cuerpo a pocos metros de su vivienda.

Tereso Cárcamo ocupaba el cargo de vocal I, de la directiva comunitaria de CODECA, después de nueve años de participación política, en la que accionó en diferentes luchas campesinas como el proceso de Asamblea Constituyente Popular y Plurinacional en Guatemala. Se involucró como defensor de derechos humanos, específicamente en el derecho al acceso a la tierra de familias campesinas, derechos laborales y agrícolas, también participaba en la exigencia de la nacionalización de la energía eléctrica.

Leiria Vay, de la dirección de CODECA, dijo que no saben quién asesinó a Tereso Cárcamo, pero agregó que es sintomático que en la región los asesinatos contra dirigentes de CODECA siempre suceden de la misma forma, “Hay grupos que en alianza con mafias y sicarios quieren mantener el poder, actúan de la misma forma siempre, desde el asesinato de Luis Marroquín”, señaló Vay.

Foto: Radio Victoria

Luis Marroquín fue un dirigente campesino de CODECA asesinado el 9 de mayo de 2018, en Jalapa, luego de haber recibido amenazas. Una mañana mientras hacía compras en una librería hombres armados con el rostro cubierto lo asesinaron por la espalda. En ese caso, Carlos Romeo Jiménez fue condenado por el hecho; Jiménez era el guardaespaldas del alcalde de San Pedro Pinula, Jalapa, Manuel Méndez quien continua en la impunidad. Desde entonces hasta la fecha son 25 los integrantes de CODECA asesinados.

“A pesar de esta represión hacemos un llamado para que no nos intimidemos, sigamos adelante en la lucha, esta muerte viene a demostrar que urgen cambios estructurales, los pueblos, las comunidades, los movimientos sociales, ya no podemos pensar en ponerle parches. Tenemos que luchar por construir un nuevo estado, de lo contrario esta ola de violencia, corrupción y saqueo va a continuar”, dijo Vay.

En los últimos días la dirigencia de CODECA en Jalapa se encuentra realizando procesos de asambleas comunitarias para elegir a quienes los respetaran, uno de los principales impulsores de estos procesos de democracia a lo interno de CODECA era Tereso Cárcamo, por esa razón se convirtió en un objetivo para los grupos que tratan de imponer el miedo para evitar la organización campesina alrededor del movimiento político de CODECA, según Leiria Vay.

“Hay miedo, por supuesto, pero la dirigencia de Jalapa no está pensando en dejar los procesos de lucha”, aseguró Vay.

Tereso Cárcamo tenía 41 años y 6 hijos, 4 de ellos menores de edad, quienes ahora quedaron a cargo de su madre y los padres de Cárcamo, que son adultos mayores.

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